Hace 10 días se detuvo a Jacqueline Yolanda Aguirre Luna, ecuatoriana de 42 años, identificada por miembros de unidades especiales de la Policía como la persona encargada de distribuir droga en calles aledañas a colegios del sector de Santa Prisca, en el  centro de Quito.

En su poder los policías encontraron 13 sobres de papel con cocaína. Para comprobar su participación en  actividades ilícitas, los agentes trabajaron encubiertos y realizaron grabaciones, las mismas que ya fueron enviadas a la Fiscalía para inicio de la instrucción.

En el sector se realizó también un allanamiento en un inmueble, en donde se  escondían 14 envolturas  que contenían  un total de 129 gramos de cocaína.

La Policía notificó que Aguirre registra una detención anterior por posesión de marihuana.
En otro caso, en el sector de Cotocollao, al norte de Quito, Luis Eduardo Chicaiza Moreno, de 20 años, y Luz María Pilca Caiza, de 52, fueron detenidos mientras expendían estupefacientes a pocas cuadras de un colegio; 22 fundas con cocaína se encontraron guardadas entre sus prendas de vestir.

Agentes asignados a estos controles indican que los continuos operativos están enfocados en luchar contra el microtráfico. La última persona detenida por esta causa fue Omar Andrés Crespo Moreno, de 24 años, que al momento de su detención tenía una mochila con cinco paquetes de marihuana.

En casos de microtráfico se incautó un total de 4.301 gramos de heroína, 67.433,50 gramos de cocaína y 3.440 gramos de marihuana, informó José Ortiz, jefe de Antinarcóticos de Pichincha, quien agregó   con respecto a la droga que es retirada de circulación continuamente, que esta vez asciende a 300.700 dosis, tanto del mercado nacional como internacional.

En lo que va del presente año,  la Policía identificó 76 sitios de expendio de estupefacientes. La mayoría se encuentran ubicados en el Centro Histórico; sin embargo, en la zona rosa de la capital también existen distribuidores. En los casos de microtráfico los menores de edad son los más solicitados para cometer esta actividad ilícita.

En los casos de los correos nacionales, canes del Centro de Adiestramiento identificaron varias encomiendas contaminadas con cocaína y heroína, cuyo destino final era España, Estonia, China, Canadá, Australia, Liberia, USA, Paquistán.

Los estupefacientes estaban camuflados en cajas de rosas, libros, paños húmedos, peluches, chocolates, partes de computadoras, pastillas de frenos de vehículo, que cuidadosamente habían sido cortadas sobre la superficie para colocar la droga en el interior;  y máscaras artesanales, las mismas que estaban elaboradas en su totalidad de cocaína, para luego ser pintadas con diferentes motivos.

Rodrigo Vega Santi,  Luis Yépez Mina y José Vinueza Villavicencio, detenidos por estar involucrados en estos envíos, se les dictó orden de prisión preventiva. Toda la droga tenía un peso de 54.872 gramos.

En lo concerniente a la droga que se intenta enviar a través de aeropuertos, en la salida internacional del Mariscal Sucre, en Quito, Ronald Guillermo Smith Soto, español de 50 años, fue interceptado por los agentes mientras intentaba transportar droga en forma líquida en una botella de licor. Su peso era de 4.540 gramos,  cuyo destino era Lisboa.

Igualmente se detuvo a  Juan Vela Robles, de 70 años y de nacionalidad mexicana, quien tenía entre sus pertenencias cuatro paquetes de plástico negro, en un bolso, con más de 4 mil gramos de cocaína, que pretendía llevar hacia Holanda.

Todo el trabajo de la Unidad Antinarcóticos se da en conjunto con otras operaciones internacionales. Hace una semana, en España, dos ecuatorianos fueron detenidos, ellos pertenecían a una red dedicada al tráfico de drogas de manera internacional; en el operativo se incautaron 20 kilos de cocaína.

“Esta red de narcotráfico enviaba los estupefacientes a través de cualquier persona que conseguían en los aeropuertos, la mayoría de veces la droga estaba de manera líquida, embotellada en frascos de perfume o shampoos”, señaló el oficial.