Evo Morales convoca la “Cumbre del Desagravio”
El presidente de Bolivia, Evo Morales, aterrizó en su país a las 22:33 (hora ecuatoriana), tras el incidente ocurrido el martes, cuando Francia, Portugal, España e Italia le prohibieron el sobrevuelo. Eso ocasionó que el mandatario permaneciera varado en la capital de Austria, Viena, al menos 14 horas.
Ayer, el avión en el que viajaba Morales realizó una escala técnica en Fortaleza (Brasil), antes de continuar su viaje hacia La Paz, donde miles de bolivianos, entre banderas y vítores, le dieron la bienvenida.
Ya en su tierra, su presencia levantó una ola de solidaridad y la convocatoria a la llamada “Cumbre del Desagravio”. A este evento asistirían hoy al menos cinco mandatarios latinoamericanos.
EE.UU. pidió a
Bolivia la extradición
del excontratista
de la NSA,
Edward SnowdenLa ofensa a Morales abrió una crisis diplomática entre la región y Europa. Las autoridades de los países señalados anteriormente sospechaban que en el avión presidencial boliviano viajaba Edward Snowden, el excontratista de la NSA que reveló los programas de espionaje de Estados Unidos y que es requerido por Washington.
El Gobierno boliviano negó esa versión y reclamó por el “secuestro” de su presidente. Debido a la postura europea, no había forma en que Morales retornara a su país, ya que los países vecinos de Austria habían prohibido el sobrevuelo.
En el aeropuerto de Viena, el jefe de Estado fue respaldado por los embajadores de Ecuador, Venezuela y Argentina. También fue visitado por el presidente austriaco.
Mientras en La Paz el gabinete, liderado por el vicepresidente Álvaro García Linera, anunciaba al mundo que Morales estaba secuestrado y que su vida corría peligro.
El canciller boliviano David Choquehuanca contó que una hora antes de ingresar al espacio aéreo francés las autoridades aeronáuticas de ese país revocaban el permiso de vuelo. A esa decisión le siguieron Portugal, España (donde debía hacer una escala técnica en las Islas Canarias) e Italia.
Ante la falta de combustible, el avión presidencial boliviano solicitó en Austria un aterrizaje de emergencia. Allí se presentó el embajador de España en Viena, quien pidió a Morales “tomar un café” en el avión.
El jefe de Estado boliviano se negó rotundamente. “No soy delincuente”, dijo posteriormente en una entrevista al canal público de su país.
En Quito, el presidente ecuatoriano Rafael Correa reaccionó indignado en Twitter. Llamó a sus homólogos de Perú y Argentina para convocar a una reunión extraordinaria de jefes de Estado de la Unión de Naciones del Sur.
Frente a esta movilización, los cuatro países europeos retrocedieron y levantaron la prohibición. Con esas garantías, Morales emprendió el regreso en la ruta prevista.
Reacción europea
Por su parte, España aseguró que nunca prohibió al avión presidencial boliviano el sobrevuelo y que autorizó en la tarde del martes la escala técnica en Gran Canaria, lo que recién ocurrió en la tarde de ayer.
El ministro español de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, expresó que no hubo “ninguna prohibición” e indicó que su país intentó “allanar el camino” para que pudiese hacer una escala en Las Palmas (Islas Canarias).
El diplomático añadió que España mantuvo conversaciones durante toda la noche con las autoridades bolivianas y con sus socios europeos, mientras el avión de Morales estaba retenido en Viena.
Subrayó que España autorizó en la tarde del martes una escala en Gran Canaria y añadió que “si hubo dificultades posteriores ha sido como consecuencia de autorizaciones para sobrevolar espacios aéreos que no son el español”.
El ministro destacó que “no es verdad que España pidiese permiso para registrar el avión” del presidente boliviano como condición para esa escala técnica. Explicó que la aeronave “no aterrizó en el plazo previsto” y se desvió a Viena. “Lo que se pidió es una ratificación de la autorización, cosa que se ha hecho esta mañana (ayer), un minuto antes de lo que nos habíamos comprometido”, añadió. “Si ha habido dificultades posteriores ha sido por autorizaciones para sobrevolar espacios aéreos que no son el español”, insistió García-Margallo.
En La Paz se registraron protestas frente a las embajadas de los 4 países europeosMientras que el presidente galo, François Hollande, dijo en Berlín que autorizó “inmediatamente” que el avión presidencial de Bolivia sobrevolara Francia cuando supo que el presidente de ese país, Evo Morales, estaba a bordo de la nave. “Hubo informaciones contradictorias sobre los pasajeros que estaban a bordo”, reconoció Hollande. “En cuanto supe que se trataba del avión del presidente boliviano, autoricé inmediatamente el sobrevuelo del territorio francés”, añadió.
Pese a las explicaciones europeas, la situación de Morales originó una serie de reacciones en América. El secretario general iberoamericano, Enrique Iglesias, lamentó “profundamente la inexcusable decisión de algunos países europeos”.
Iglesias manifestó su “perplejidad ante el trato impropio que se ha brindado a un jefe de Estado iberoamericano” y expresó su confianza en que “los países involucrados ofrezcan las debidas explicaciones a las autoridades bolivianas”.
La misma crítica hizo el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza. La Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba) se sumó a la condena.
Reunión de Unasur
Pese a los esfuerzos de varios países sudamericanos, la Unasur no lograba hasta la tarde de ayer convocar a una reunión extraordinaria de presidentes.
El canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, señaló que cinco presidentes de la Unasur “están dispuestos” a ir hoy a Bolivia para respaldar al mandatario Morales. “Presidentes de Ecuador, Argentina, Venezuela, Uruguay y Surinam dispuestos a ir a Cochabamba a respaldar a Presidente Evo”, escribió Patiño en su cuenta de Twitter.
Por su parte, el presidente ecuatoriano, en la misma red social, manifestó su esperanza de que se pueda celebrar una cumbre. “Mañana, a las 15:00, varios presidentes nos reuniremos en Cochabamba para apoyar a Evo. Ojalá podamos hacer una cumbre de Unasur”, escribió Correa en su perfil de la red social.
Pero la canciller de Perú, Eda Rivas, aclaró que esa reunión “no es una cita de la Unasur”, sino una reunión de desagravio al mandatario boliviano. Rivas, cuyo país ocupa la presidencia pro témpore del organismo, dijo que “se están haciendo las coordinaciones” con los países miembros del bloque para convocar a una eventual cumbre urgente.
Estados Unidos
Según los norteamericanos, la prohibición de que el avión presidencial boliviano sobrevolara algunos países europeos fue una decisión individual de cada uno de ellos. “Las decisiones fueron tomadas por países individuales y deberían preguntar a ellos por qué toman esas decisiones”, afirmó Jen Psaki, portavoz del Departamento de Estado en su rueda de prensa diaria.
Psaki eludió precisar si EE.UU. habló con esas naciones para evitar la llegada de Snowden. “En los últimos 10 días hemos estado en contacto con un amplio número de países con posibilidad de que Snowden aterrice o transite a través de alguno de ellos”, reiteró la portavoz.
Lo cierto es que Washington solicitó a Bolivia la extradición de Snowden, buscado por espionaje, en caso de que ingrese al país sudamericano, informó el canciller boliviano, David Choquehuanca. “Estados Unidos nos ha hecho llegar una nota, donde solicita la extradición, en caso de que el ciudadano Edward Snowden esté circulando en territorio boliviano”, reveló el funcionario.
Paralelamente, manifestantes se concentraron ante las sedes de varias embajadas en La Paz, entre ellas la estadounidense y la española.
Frente a ello se cerró el Centro Cultural de España en La Paz y las oficinas de la Agencia Española de Cooperación Internacional (Aecid), mientras la Embajada permanecerá con el personal mínimo.
Álvaro García Linera dio a conocer que, una vez que Morales arribe a La Paz, los embajadores de los cuatro países europeos involucrados en la agresión serán convocados para pedirles explicaciones.
EUROPA CONDICIONA UN TLC CON EE.UU.
El presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, condicionó ayer la negociación para el Tratado de Libre Comercio (TLC) con Washington al esclarecimiento del presunto espionaje de EE.UU., lo que correrá a cargo de sendos grupos de trabajo, europeo y estadounidense, que trabajarán “en paralelo”.
La negociación “es de gran importancia” para Europa, indicó Durao Barroso en una conferencia de prensa conjunta con la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, François Hollande.
La negociación, sin embargo, solo puede comenzar si esa evaluación por parte de ambos equipos se produce “al mismo día, al mismo tiempo”, añadió Hollande, cuyo país había manifestado su voluntad de suspender temporalmente el inicio de las conversaciones por el presunto caso de espionaje de EE.UU.
El presidente francés recordó que las competencias respecto a la apertura de las negociaciones corresponden a la CE, pero insistió en la posición de su gobierno y en la necesidad de poder contar con una “evaluación precisa” sobre el presunto espionaje de EEUU.
Durao Barroso explicó que la formación de ambos grupos de trabajo, norteamericano y europeo, había sido acordado con Washington con la intención compartida de garantizar una “base sólida de confianza mutua”.
Merkel, por su parte, expresó su respaldo al presidente de la CE en la iniciativa para la formación de esos equipos.
París ha mantenido, hasta ahora, una posición más contundente que Berlín en lo relativo a las negociaciones para el Tratado de Libre Comercio, al plantearse incluso su suspensión temporal.
El gobierno alemán y la propia Merkel han advertido repetidamente de eventuales consecuencias en caso de que resulten ciertas las informaciones difundidas por los medios, según las cuales Alemania era incluso “objetivo prioritario” del espionaje de EE.UU. “Queremos una evaluación veraz para saber lo que ocurrió, si fuimos espiados o incluso algo peor que eso”, dijo Hollande, en relación al caso.
El presidente francés condicionó el lunes la negociación a que Washington ofrezca garantías del cese del espionaje a sus socios europeos.
LA CONVENCIÓN DE VIENA FUE DESCONOCIDA
El Derecho Internacional tiene su fundamento en la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas del 18 de abril de 1961.
Allí se contempla que las inmunidades y privilegios se conceden, no en beneficio de las personas, sino con el fin de garantizar el desempeño eficaz de las misiones diplomáticas.
En este documento también se especifica la inviolabilidad de locales y medios de transporte. “Los locales de la misión, su mobiliario y demás bienes situados en ellos, así como los medios de transporte, no podrán ser objeto de ningún registro, requisa, embargo o medida de ejecución”, establece la norma.
Tanto Francia, España, Portugal y Bolivia son signatarios del acuerdo internacional. Por ello, para el excanciller ecuatoriano Francisco Carrión es inadmisible el trato que se le ha dado al presidente boliviano, Evo Morales, “tanto en sentido normativo o en Derecho Internacional y en materia de prácticas internacionales. El avión de un presidente goza de un estatus distinto y una vez que ha cumplido con todos los requisitos y el plan de vuelo aceptado, es reprochable el hecho de que no se le haya permitido sobrevolar y en algún caso aterrizar para abastecimiento”. El también investigador de la Flacso explicó que “no cabe revisar el permiso de vuelo que le habían considerado con anterioridad”.
En cuanto a las reacciones recomendó hacerlo “con cierta frialdad y cautela, pero al mismo tiempo con cierta firmeza. Yo creería que una vez que Morales llegue a La Paz debe actuar de una manera absolutamente firme, porque ha habido casi una violación a la soberanía de Bolivia por parte de estos países. Pueden tomarse muchas medidas que se aplican en Derecho Internacional, como el retiro de embajadores, expulsión de representantes de esos países del territorio boliviano o ruptura de las relaciones diplomáticas; pueden haber varios niveles de acción por parte de Bolivia”.
Además, recalcó que es importante el respaldo que ese mandatario ha recibido de “un significativo número de Jefes de Estado que se han solidarizado con él”.
Enfatizó también que “en el caso de España y Francia, porque Portugal tiene menos vinculaciones con América Latina, han actuado de manera inadmisible y pueden estar en riesgo las relaciones futuras en cuanto a inversiones o explotación de gas, que se verían seriamente afectadas”.
El catedrático recordó que la convención de Viena establece la inviolabilidad territorial y de los locales de los países en el exterior, que se extiende a los vehículos oficiales. Recalcó que no pueden ser violados bajo ninguna circunstancia, porque se aplica la extraterritorialidad.
Con varios de estos criterios coincide el politólogo Simón Pachano, pero aclara que la reacción si bien debe ser enérgica no debe trascender al retiro de embajadores o romper relaciones diplomáticas. “Es reprochable lo sucedido, pero la reacción no debe ser desproporcionada”, dijo Simón Pachano.