“Perdón, señora juez, pero aquí se están buscando cabezas de turco (acusar injustamente a inocentes para encubrir a otros)”, increpó ayer Emiliano Donoso, abogado de Roberto Sandoval Cevallos, ex integrante del directorio de Cofiec, quien fue detenido a las 23:00 del lunes pasado en el marco de las investigaciones sobre el préstamo de 800 mil dólares otorgado al argentino Gastón Duzac, en diciembre del pasado 2011.

El jurista dijo esto durante la audiencia de formulación de cargos desarrollada ayer en la Fiscalía Provincial de Pichincha, en contra de dos de los cinco ex miembros del directorio de Cofiec: Omar Javier Unda Izurieta y Roberto Sandoval (ver gráfico).

Donoso resaltó la falta de competencia de la fiscal María Rodríguez para presentarse en la audiencia y solicitar la prisión preventiva de los implicados, así como de la juez de Garantías Penales, Paulina Sarzosa, por cuanto los ex miembros del directorio de Cofiec gozan de fuero de corte y su caso debía ser conocido por un fiscal y un juez provincial.

La defensa se amparó en la disposición transitoria decimoquinta del Código Orgánico de Finanzas Públicas, la cual  estipula que  los directivos de bancos manejados por el fideicomiso AGD-CFN No más Impunidad deben ser procesados por jueces provinciales.

Acogiendo el argumento y tras un receso de 33 minutos, Saroza se declaró “incompetente” para conocer el caso, se inhibió y dijo que enviaría el expediente a la Corte Provincial, para que, dentro de las 24 horas posteriores a la detención de Sandoval y Unda, decida si dicta o no medidas cautelares u ordena su prisión preventiva para garantizar que comparezcan y no huyan del país.

Esto también fue rechazado por Donoso, pues adujo que desde el 4 de octubre pasado vienen colaborando en las investigaciones y como muestra de ello fijaron casillero judicial y justificaron en calidad de qué (ex miembro del directorio de Cofiec) Sandoval acudía a rendir su versión, lo que confirmaría que “no vamos a huir”.

Sin embargo -en su exposición- la fiscal Rodríguez argumentó que la implicación de Sandoval y Unda en el delito de peculado radica en que mediante el envío de simples correos electrónicos dieron viabilidad a la aprobación de la línea de crédito en favor de Duzac, pese a que “por simple lógica” pudieron darse cuenta de que  los certificados de depósito de Rocafuerte Seguros que garantizarían el préstamo jamás existieron, no habían copias certificadas de documentos, referencias bancarias y de propiedades de Duzac en el Ecuador,  y que solo existía un formulario de solicitud de crédito llenado con datos muy generales y escuetos.

Pese a ello -a decir de la fiscal- en cuatro líneas el ex presidente ejecutivo de Cofiec, Antonio Buñay, ordenó dar viabilidad al préstamo y en tres líneas Sandoval y Unda lo aprobaron, mientras que Germánico Maya, ex presidente del directorio del banco, lo hizo en apenas 1 línea.

Ante esto, la defensa de ambos detenidos aclaró que por ser miembros del directorio de Cofiec, no tenían la responsabilidad de verificar esa información o de que se cumpliera con los requisitos, sino que eso le correspondía, por ejemplo, a la gerencia de crédito.

Rodríguez, sin embargo, insistió en que se inobservaron todos esos requisitos y que en un tiempo récord de 18 días se acogió la solicitud de crédito, pasó las diferentes fases de verificación, se aprobó mediante correos electrónicos y se desembolsaron los $ 800 mil mediante dos giros al exterior.

Esto, incluso, pese a que Duzac primero indicó que requería el crédito para un proyecto de plataforma informática y luego dijo que  lo requería para invertirlo en la compra de acciones. Para ayer en la tarde, en la Primera Sala Penal de la Corte Provincial de Pichinha estaba prevista la audiencia de formulación de cargos contra los detenidos.