Los pacientes que acudieron al hospital Pablo Arturo Suárez, en el norte de Quito, no tuvieron mayores inconvenientes en sus consultas, pese a la tentativa renuncia de más de 80 médicos especialistas de esta casa de salud.

María Martínez acudió temprano al hospital para retirar unos exámenes y descartar así una enfermedad. “No espere mucho tiempo, me entregaron los resultados y el doctor me dijo que no tengo nada, yo noté todo normal hoy en este hospital, ayer escuché que renunciaron bastantes médicos y vine con miedo de que no me atiendan, pero por suerte el doctor si vino a trabajar”.

Rosa Hualcopo acudió a esta casa de salud porque padece un problema en su espalda, “tengo una consulta programada para el lunes próximo, hoy me vine al hospital para ver si no me cambiaron o suspendieron el turno, por suerte me van a atender normalmente”.

En los pasillos del hospital, el ir y venir de personas y médicos fue normal. Una enfermera que prefirió no dar su nombre afirmó que “los médicos que renunciaron hoy vinieron a trabajar, todos están en sus consultorios o con sus pacientes dándoles atención normal”.

Gabriela Calero, comunicadora social del Pablo Arturo Suárez, manifestó que todos los médicos atendieron hoy con normalidad y quienes presentaron sus renuncias permanecerán en sus cargos por 15 días más y que cualquier información será únicamente emitida por funcionarios del Ministerio de Salud.

Hasta el momento, la única renuncia confirmada es la de Juan Barriga, quien no acudió al trabajo, ya que en estos días se encuentra de vacaciones y por tal motivo no acudirá los 15 días que dicta la ley para que se haga efectiva la renuncia.