La Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa) y el Centro de la Industria Láctea (CIL) han firmado un convenio de cooperación técnica con el objetivo de mejorar la regulación y competitividad del sector lácteo en Ecuador. Esta alianza busca garantizar la calidad e inocuidad de los productos destinados al consumo de la población.

Durante la firma del acuerdo, el director ejecutivo de Arcsa, Daniel Sánchez Procel, y la directora del CIL, Verónica Chávez Man-Ging, destacaron la importancia de esta colaboración para el desarrollo sostenible del sector productivo lácteo.

Objetivos del convenio

• Mejorar la regulación sanitaria mediante el intercambio de información estadística.

• Impulsar iniciativas conjuntas que fomenten la competitividad de la industria.

• Identificar oportunidades para optimizar la producción y comercialización de productos lácteos.

• Facilitar el acceso a información técnica y regulatoria en beneficio de productores y consumidores.

Sánchez Procel resaltó que muchas de las empresas del CIL participan en el Plan de Alimentación Escolar, un programa clave para combatir la desnutrición infantil. "Este convenio representa un avance significativo en la garantía de calidad de los productos que llegan a los consumidores", afirmó.

Por su parte, Chávez Man-Ging subrayó que esta colaboración contribuirá al fortalecimiento del sector y a la formalización de los productores lácteos. "Trabajaremos junto a Arcsa para promover una alimentación segura y adecuada, beneficiando a toda la cadena de producción y consumo", indicó.

Con esta iniciativa, ambas entidades reafirman su compromiso de mejorar la calidad y seguridad de los productos lácteos en Ecuador, promoviendo la formalización del sector y el desarrollo de una industria más competitiva.