Coca Codo Sinclair tiene 805 microfisuras
Un total de 805 microfisuras han sido detectadas en el distribuidor de la turbina 4 de la Hidroeléctrica Coca Codo Sinclair (CCS).
La mayoría tienen dimensiones de entre 1,5 y 2 milímetros de longitud, excepto dos que llegan a los 22 milímetros. No obstante, las autoridades aseguran que la operación de la central no corre riesgo de momento.
Carlos Pérez, ministro de Energía y Recursos Naturales No Renovables, quien recorrió este viernes 1 de junio las instalaciones, aseguró que el estado actual de la planta “no es preocupante” y está operando con normalidad.
Las fallas se presentaron desde 2014. Pérez atribuyó la situación a que no se cumplieron en su totalidad procedimientos técnicos en la fabricación de los materiales en China.
El 60% de las microfisuras fue reparado puliendo la superficie, mientras que el 40% requería soluciones con pintura, aclaró René Morales, jefe a cargo de Coca Codo Sinclair.
Aunque las condiciones de las instalaciones por el momento no son alarmantes, el Ministro informó que se intervendrá toda la infraestructura de los distribuidores de las ocho turbinas para evitar riesgos futuros.
Para esto se llegó a un acuerdo con la constructora china Sinohydro, responsable de la obra, que deberá cumplir con los compromisos del contrato reparando y reemplazando el material dañado.
El acuerdo consiste en la contratación de una firma internacional que inspeccionará a fondo los sitios donde se han encontrado inconvenientes, a fin de medir la magnitud de los daños y la forma como deben ser atendidos.
Sinohydro deberá escoger una de tres compañías que Ecuador proponga. En aproximadamente 45 días se suscribirá el contrato que correrá por cuenta de la constructora china, indicó Pérez.
A parte de las microfisuras existen inconvenientes en los transformadores, manuales de operación y software. Pérez indicó que mientras no se atiendan todos los desperfectos el Estado no firmará el acta de entrega definitiva.
Coca Codo Sinclair está ubicada en la provincia de Napo. Su construcción empezó en 2010 y fue inaugurada en 2016 con una inversión de $ 2.100 millones. Su capacidad es de 1.500 MW.
El anterior gobierno catalogó a esta hidroeléctrica como un proyecto emblemático, pero actualmente es investigada por la Contraloría General del Estado. (I)