La Universidad Católica se afirmó ayer como líder solitario del Campeonato Ecuatoriano de Fútbol, luego de alcanzar una clara y significativa victoria sobre el  Deportivo Cuenca por 3- 1.    

Sin salirse del libreto del fútbol agradable que raya en el buen trato al balón y claros conceptos en la aplicación táctica-estratégica, el conjunto que adiestra el argentino Jorge Célico desplegó un accionar consistente, luego de tibias insinuaciones de la visita que no reportaron réditos en los botines del solitario atacante Andrés Ríos.

El tanto de apertura se registró a los 14 minutos por medio del uruguayo Diego Benítez. La jugada la inició Carlos Moyano desde tres cuartos de cancha; José Luis Cuesta apareció para la recepción del pase y el centro  retrasado encontró solitario a Benítez en rauda incursión y con suave toque venció al  golero Marcelo  Ojeda.   

La desventaja motivó la lógica reacción del plantel cuencano. Prezotti probó a Hernán Galíndez en dos oportunidades, pero la respuesta del arquero “camarata” fue eficiente.

Henry Patta propició el segundo tanto de la “Chatoleí” a los 22’. Con balón dominado y tras sortear a un adversario, arribó cerca de la raya que delimita el campo de juego y ensayó un centro a ras de piso; José Cuesta surgió impetuoso ante la marca de Mariano Mina, alargó su botín diestro y puso las cosas 2-0.

La segunda mitad fue mucho más entretenida para alrededor de 400 espectadores, incluyendo una reducida barra de los “camisetas coloradas”, presentes en el escenario de El Batán.  

Una bonita anotación de la “belleza” Andrés Mendoza, subió la cuenta a los 61’. Sorpresivamente, el lateral por derecha invadió campo adversario y cuando menos se lo esperaba despachó furibundo remate al vértice superior derecho y dejó sin reacción al golero argentino.

Luego del tanto, el conjunto local guardó reservas físicas, mientras el elenco visitante experimentó una briosa reacción, con un cambio de actitud que, posteriormente, le permitió descontar la diferencia.  

El ingreso de Xavier Charcopa, en reemplazo de David Matute, repercutió en el andamiaje ofensivo de la visita. El recién ingresado imprimió velocidad en un desplazamiento por el costado y la presencia de Ríos en el área motivó el servicio que en dos instancias frente a Hernán Galíndez capitalizó el delantero argentino a los 67.

El descuento dio lugar a cierta descomposición del sistema defensivo local. El ingreso de Carlos Quillupangui y Carlos Cuero en reemplazo de Matute y Álex González estuvo dispuesto para cortar las vías de salida del medio campo cuencano y frenar el ímpetu que exhibieron José Granda y Sebastián González.

Lamentablemente, una brusca acción de Prezzotti sobre Benítez motivo su expulsión a los 79 y desde entonces Deportivo Cuenca jugó con 10 elementos, circunstancia que dio cierto respiro a los “camaratas” hasta el pitazo final de Carlos Orbe.