Prueba, homenaje para quienes están lejos

Este domingo se realizará en Quito la cuarta edición de la prueba pedestre El Migrante, de 10 kilómetros de recorrido. La salida será a las 07:00 en la intersección de la avenida Galo Plaza Lasso y calle Isaac Albéniz; la llegada, a la altura de las avenidas Amazonas y Japón.

Según Carlos Cárdenas, coordinador del certamen, la prueba se organiza en conmemoración del Día Internacional del Migrante, que se celebra el 18 de diciembre de cada año. Por esta razón, si bien la carrera es abierta al público, buen número de participantes son allegados o parientes de ecuatorianos radicados en el exterior. Las inscripciones se cerrarán a las 18:00 de hoy.  

Los interesados pueden enlistarse en las estaciones norte y sur del trolebús, en el almacén Silvio Guerra Sports del Centro Comercial Caracol y junto a la Cruz del Papa (parque La Carolina). O a través del portal www.elmigrante.com.ec. El cupo cuesta 12 dólares.   

Los chips de competencia se entregarán mañana, de 09:00 a 17:00, en el coliseo del Ministerio del Deporte (Gaspar de Villarroel y 6 de Diciembre).

Inspiración

Han transcurrido 13 años desde que Hólguer Freire (43 años) partió para establecerse en España, pero no pasa un día sin que su familia desee tenerlo de vuelta. Su hermano, Francisco Freire (38 años), correrá en homenaje a él.

Los Freire son de Píllaro (Tungurahua), donde pasaron la infancia y la adolescencia. Hólguer -recuerda Francisco- fue seleccionado del colegio Jorge Álvarez y ganó varias bregas de velocidad, semifondo y lanzamiento de jabalina. También le apasionaba el dibujo. “Debido a sus labores dejó de entrenar, pero se da tiempo para pintar. Un cuadro de un príncipe con 2 galgos reposa en el cuarto de mi madre, se lo envió desde allá”, relata Francisco.

Sin embargo, ni los cuadros ni las fotografías llenan el vacío del hermano o del hijo. Francisco nunca olvida las penurias que sufrió Hólguer durante los primeros meses de permanencia en España, situaciones que hicieron padecer a su progenitora, Gloria Freire (67 años).

En calidad de diseñador de calzado viajó a Murcia con la promesa de tener un empleo en el que podría desempeñar esos conocimientos, mas no le cumplieron. Hólguer tuvo que dedicarse a la agricultura, con jornadas que iban desde las 04:30 hasta las 19:00.

Afortunadamente las cosas cambiaron, lleva más de 10 años como parte del equipo de seguridad del aeropuerto de Madrid, con horarios menos extenuantes. Hólguer vive junto a su esposa, Mónica Maila, y sus hijos: Grace (15 años), Joshua (4 años) y Sofía (2 años), los 2 últimos, nacidos en España. “Gracias a mi hermano me gusta el atletismo, un modo de vida que retomé hace 4 años, luego de tener sobrepeso”, comenta Francisco, técnico en reparación de electrodomésticos.