La sanción parece inminente, pues Luis Chiriboga, presidente de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF), ratificó la noche del pasado martes, en Guayaquil, que continuará con el expediente que se abrió la semana pasada contra Esteban Paz, presidente de la comisión ejecutiva de Liga (Q).   

El directivo “albo” reaccionó inmediatamente y esa misma noche dijo que mantiene firme su postura respecto a la negociación de los derechos de televisión del Campeonato Nacional (series “A” y “B”). Paz expresó que no le teme a una posible sanción de la Ecuafútbol por sus expresiones sobre este tema.

Lo confirmó durante una entrevista en una radio deportiva quiteña. “Si me quieren sancionar, pueden hacerlo, pero no me impedirán que trabaje por Liga. Esto me ha dado más ganas de seguir haciéndolo. Que le quede claro a la FEF que no estaré callado e iré hasta el final en este tema que está lejos de terminar”, advirtió el directivo.

Paz no se presentó el martes pasado a la Comisión Disciplinaria de la FEF, pero envió una justificación de su inasistencia y la predisposición para acudir al lugar en una próxima fecha, aún no establecida. El síndico de la FEF, Guillermo Saltos, quien defiende a Chiriboga, adelantó que se pedirá una sanción “ejemplarizadora” para Paz por atentar contra la dignidad y el honor del titular de la Ecuafútbol.

“Lo que se solicita es que se repare el daño a la honra del presidente Chiriboga con una pena que puede ir hasta 5 años, pero será la Comisión Disciplinaria la que decida. Hay un agravante porque Paz no se retractó de sus palabras sino que las ratificó. Pero como él ha dicho que la sanción no afectará su labor en LDU, es un saludo a la bandera”, refirió Saltos.

El jurisconsulto guayaquileño adelantó -además- que los clubes tendrán plazo de un año para arreglar todos los contratos que estén pendientes con las televisoras que actualmente transmiten los cotejos del torneo local. Las diferencias entre Liga de Quito y el titular de la Ecuatoriana se ahondaron en enero pasado durante el Congreso Ordinario, en el que se decidió trasladar la potestad de negociar los derechos de TV de los clubes a la FEF, a través de un concurso que no se realizó.

Paz sostiene su oposición en el hecho de que todo el proceso desarrollado para adjudicar finalmente los derechos a los canales incautados por el Gobierno -TC Televisión y GamaTV- desde 2013 hasta 2017, no ha sido transparente y que “se ha manejado por debajo de la mesa”.

Precisamente esa expresión emitida en octubre pasado fue la que originó el enojo de Chiriboga para ordenar la apertura del expediente. “No nos oponemos a las ideas, y menos a generar más ingresos para los equipos, pero siempre que se maneje de una forma clara y no atropellando a los clubes, sin respetar los contratos firmados que existen. Además, se dice que ningún equipo recibirá menos ni tampoco más de lo que percibe hasta hoy, ¿entonces cuál es el beneficio?, porque no se sabe ni la forma de pago ni los plazos. Eso no lo tienen claro en la Ecuatoriana y a estas alturas es terrible”.

La moción de que los derechos de televisión sean manejados por la FEF fue presentada por la Asociación de fútbol del Tungurahua. Sin embargo, el ex presidente de Macará, Manolo Holguín, demostró que la idea original fue de la propia Ecuafútbol y lo demostró con los e-mails que envió Álex De la Torre (titular de la Comisión Disciplinaria) a dirigentes de la Asociación de Tungurahua. “Se escogió a dos canales a dedo. Ahora estamos en un pozo de incertidumbres con reglas que cambian de un momento a otro, ni ellos mismos tienen clara la película”, enfatizó Paz. 

El dirigente recalcó que no permitirá que se atente contra los principios y las decisiones de quienes dirigen la institución “alba”.