Lo  hicieron de nuevo. Los tenistas Julio Campozano y Roberto Quiroz demostrando un tenis de alto nivel, se alzaron la noche del sábado con el título en dobles del VII Challenger de Guayaquil, tras derrotar en la final a la pareja integrada por Marcel Felder, de Uruguay, y Rodrigo Grilli, de Brasil, por 6-4 y 6-1.

El haber estado tan cerca de obtener la medalla de oro en los Juegos Panamericanos, celebrados en octubre pasado, en Guadalajara, sirvió como un envión para la dupla tricolor, quien demostró que está en su mejor momento y que se entiende muy bien en la pista.

Durante todo el partido demostraron mucha concentración y efectividad tanto en las devoluciones como en la net donde ejecutaron voleas que arrancaron aplausos de los aficionados.

El punto final lo lograron gracias a un fuerte tiro de derecha que ejecutó Campozano, el cual  Grilli no pudo devolver bien y envió su volea afuera.

Los jugadores que escogieron un color de camiseta para cada partido (azul, rojo y naranja) festejaron con el verde su triunfo en su ciudad natal y el último torneo del año para ambos.

“Elegimos un color diferente como cábala, pero no fue nada preparado, solo que se me ocurrió a partir de que pasamos a las semifinales. Antes de la final estábamos en el camerino eligiendo el color, Roberto quería amarillo porque es Barcelonista y yo azul por Emelec, pero mejor nos quedamos con uno imparcial”, comentó Julio.

Además contó que así se imaginaba terminar su año tenístico ganando en Guayaquil y que ahora se dedicará a disfrutar de sus vacaciones, hasta el próximo 12 de diciembre, día en que viajará a Buenos Aires para su pretemporada. “A partir de la tercera semana de enero del 2012 comienzan las giras”, dijo Julio, quien evaluó su año como el mejor de su carrera.

Además, el guayaquileño comentó que sí estaba seguro de poder ganar en dobles por cómo se fueron dando los encuentros y conociendo los rivales. “Ha sido un año bastante bueno, uno de los mejores. Aunque tuve lesiones a principios de año, a partir del segundo semestre me fue muy bien. Ha sido mucho  sacrificio y trabajo”, añadió.

Además sobre su compañero en dobles, manifestó que cada día se están entendiendo más y eso va a ser muy importante para los objetivos de la Copa Davis, en donde un partido de dobles, a veces, puede definir la serie. “Es bueno para nosotros y para el país.

En febrero nos toca jugar contra Colombia en Guayaquil”, dijo Julio, quien sumó su segundo título en el Challenger. El primero lo consiguió en  el 2009, en el cual hizo dupla con Emilio Gómez, primo de Roberto Quiroz, quien a su vez logró su primer título a nivel de Challenger.

Durante la premiación ambos jugadores agradecieron a los organizadores por haberles concedido la invitación (wild card) para jugar el cuadro principal. “Ha sido una semana  inolvidable, gracias a todos por el constante apoyo”, declaró emocionado Roberto, quien también tomará sus vacaciones hasta el próximo año.

Italiano, el nuevo campeón

Antes de la final de dobles, se disputo la de singles, en la que el italiano Matteo Viola derrotó por 6-4 y 6-1 al argentino Guido Pella, en solo una hora 18 minutos de juego.

Al inicio del partido, el joven jugador “gaucho” empezó rompiendo el saque al italiano, pero éste minutos después se acomodó rápidamente y se adaptó mejor al viento y la cancha lenta del Pancho Segura Cano.

En el primer set, el europeo la tuvo difícil, pero su gran movilidad le dio la facilidad para llegar mejor parado y ejecutar sus tiros, especialmente el revés.

“Me siento afortunado, aún no puedo creerlo, jugué con un rival muy complicado. Agradezco a la gente por el apoyo y espero el próximo año regresar. Es la tercera final de un Challenger, y por fin me llevé un título”, manifestó Viola, quien celebró el triunfo con su novia Wendy Rinzafri. El campeón Viola se acreditó 90 puntos ATP y Pella, 55.