Abu Dabi, Emiratos Árabes Unidos.-

En un torneo de exhibición no están de más las bromas, risas y el público animando sin pudor a sus favoritos. No faltó nada de eso en Abu Dabi, pero tampoco faltó tenis.

El español Nicolás Almagro y el serbio Novak Djokovic solo se jugaban un título anecdótico no oficial en la ATP,  sin embargo no escatimaron esfuerzos para dar un buen espectáculo. Al final, el mejor tenista del mundo se impuso por 6-7 (4), 6-3 y 6-4.

No hubo inconsistencia en el juego de “Nico”, que tuvo la oportunidad de su vida de ganar a “Nole” por primera vez en sus cuatro duelos directos. El serbio, ciclón ante David Ferrer en las semifinales, estuvo más lento y menos preciso de lo habitual.

Almagro, por el contrario, se mostró seguro y desafiante con su servicio, que le sacó de más de un apuro.

Tanto, que en el primer set del encuentro no hubo apenas opciones de romper el saque de ninguno de los dos jugadores. Almagro, que acudió al torneo a última hora por la baja de su compatriota Rafael Nadal, aprovechó el momento para ponerse a prueba y descubrir que estuvo muy, muy cerca de vencer al número 1.

En un primer parcial sin errores, el español obligó al serbio a disputar muerte súbita en la que la templanza estuvo del lado del murciano.

Sin embargo, Almagro se salió del partido por un par de ocasiones en el segundo set que ofrecieron en bandeja los dos “breaks” que le valieron el segundo set.
Más igualado estuvo el tercero, en el que, a pesar de sufrir en sus juegos, el servicio sacó de más de un apuro al español.

Solo en el último juego, con su servicio, y la presión encima, Almagro se precipitó en su juego, queriendo terminar el punto antes de jugarlo y cedió el set y el partido para que “Nole” pueda revalidar el título obtenido también en 2011 ante David Ferrer.

Ferrer completó el podio

En el partido que discernía al tercero y cuarto lugares del certamen, David Ferrer se mantuvo fiel a su juego y no tuvo demasiados problemas para superar al serbio Janko Tipsarevic por parciales de 7-6 (4) y 6-2 en casi dos horas de partido.

Pronto se puso con un claro 5-2, pero el orgullo del serbio le sirvió para forzar un “tie break” que finalmente perdió. Más fácil lo tuvo en el segundo set, en el que no dio opción alguna a Tipsarevic y se lleva de Abu Dabi muy buenas sensaciones para encarar el nuevo año que empieza. “Aquí he tenido la mejor oportunidad para jugar con los mejores, y es una buena preparación para jugar el torneo de Doha”, dijo el campeón.