Alfredo Intriago, presidente del gremio de árbitros, afirmó que esperarán hasta las 17:00 tomar una decisión de paralizar sus actividades, en caso de que no se revierta la decisión de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) con respecto a la sanción al equipo de Pilahuín Tio, de jugar el resto del torneo de Segunda Categoría sin público.

El pedido del gremio arbitral es que la sanción sea más drástica. Piden que el equipo quede fuera del torneo, debido a la agresión que sufrió el cuerpo arbitral el fin de semana pasado en el partido entre Pilahuín Tío y Delfín.

Intriago dijo que en conversaciones preliminares con el presidente de la FEF, Luis Chiriboga, se pensó suspender definitivamente al cuadro imbabureño, pero tras la reunión la decisión cambió, por ello los árbitros se consideran burlados.

El dirigente arbitral sostuvo que “lamentablemente a nuestro gremio siempre nos están obligando a tomar decisiones antipopulares. Se siguen dando hechos bochornosos y lamentables, no nos queda otra opción que tomar decisiones drásticas. Soy claro en decir las cosas, he sido un caballero siempre, me veo obligado a denunciar esta situación de forma pública para que no se piense que se toma una decisión porque nos da la gana”, acotó.

Álex de la Torre, presidente de la Comisión de Disciplina de la FEF, afirmó que no cederán ante el pedido de los árbitros, ya que el reglamento prohíbe cambiar la decisión tomada y Comité Ejecutivo podría analizar el caso particular para la disminuir de la sanción, nunca para aumentar el castigo.

De la Torre explica que la sanción aplicada se debe a “que en el informe arbitral no se detallan los incidentes y el árbitro escribe un párrafo pequeño que consta que el cuarto árbitro fue agredido, pero no se dan más detalles de lo sucedido”.

El presidente de la Comisión disciplinaria explicó que existe otro informe de la Comisión de Seguridad elaborado en primer persona en el que se describen todos los detalles, pero que "ningún miembro de esta Comisión estaba presente en el partido, por lo que no podía escribir en primera persona y menos dar detalles de lo ocurrido, por lo que este informe no se le consideró válido”.

Álex de la Torre afirmó que la sanción aplicada al equipo imbabureño se basó en los reglamentos de la FIFA y que según lo escrito en el informe arbitral es un castigo severo, pero no se puede realizar cambios más drásticos al ya impuesto al Pilahuín.