La suplantación de identidad es uno de los delitos más comunes de Internet y aunque las redes sociales son conscientes de esta problemática, no logran erradicar esta práctica que solo en pocos países está tipificada como delito. Son tantos los casos de usurpación de identidad que Facebook recibe a diario cientos de denuncias de cibernautas víctimas de este delito. Si bien Facebook no es el responsable de estos robos de perfil, su comunidad de usuarios exige mecanismos que los protejan de personas malintencionadas que buscan sacar provecho al suplantar la identidad de otros.

La nueva herramienta de Facebook alertaría al usuario en el momento en el que detecte que alguien se está haciendo pasar por él, utilizando su nombre y foto de perfil. Facebook, en realidad, tendrá una tarea titánica, porque, según anunció, será un método automático se encargará de gestionar cada caso. Parte de su efectividad radica en el denominado reconocimiento facial, lo que significa que la herramienta trata de buscar similitudes entre los diferentes perfiles, tanto en la fotografía como en el nombre. Una vez detectados, la fecha de creación determinará cuál es el verdadera, siempre el más antiguo, o lo que es lo mismo, lícito en origen. En el ciberespacio, la suplantación de identidad puede adquirir diferentes formas: en ocasiones, los infractores se apoyan en vulnerabilidades tecnológicas para poder hacerse con el control de cuentas de correo electrónico o perfiles de mensajería instantánea; otras veces hacen uso de técnicas de ingeniería social. (E)