Basta ya, por favor, de tanto rencor, críticas, frustraciones. No es momento de atacar a nadie, es momento de ser solidarios y ser uno solo, un solo Ecuador, sin derecha ni izquierda, solo un centro, que debemos seguir para que el mundo vea que la catástrofe en nuestro país hace desaparecer rencores, peleas, rivalidades, posiciones políticas. Es hora de demostrar al mundo que todos nos damos las manos y trabajamos juntos sin importar ideología, credo, posición social, solo así saldremos adelante.

Basta ya de criticar tanto por redes sociales y mandar WhatsApps irónicos e hirientes a una persona a la que lo único que hemos visto hacer en estos días es estar presente al pie del desastre, como lo debe hacer un capitán con su nave o un general con su ejército, ser el primero en salir y no solo sentarse a ver y delegar.

Todos hemos visto cómo nuestro Presidente ha estado desde un primer momento en las zonas de desastre, muchas veces sin haber dormido ni comido bien, por estar preocupado por su gente.

Ese tiempo que invertimos en mandar mensajes hirientes y denigrantes deberíamos ocuparlo para mandar mensajes pidiendo ayuda al mundo, a nuestros propios hermanos, para que ayuden a sus hermanos. Todos somos una sola patria, no la dividamos con tonterías denigrantes, que lo único que demuestran al mundo es nuestra inmadurez.

Aquí no debe existir la división, debemos sumar, no restar, debemos tomar la mano de uno de nuestros hermanos caídos y levantarlo.

Dejen de insultar y lamentarse por lo que no tenemos, busquemos la solución, no agravemos el problema y aprendamos en estos momentos a dar gracias por toda la ayuda que se ha conseguido, por todos los países que se han solidarizado con nosotros y ¿por qué no?, darle las gracias cuando veamos al sr. Presidente recorriendo las zonas de desastre. Un gracias es una palabra de aliento y una fuerza que lo ayudará a seguir adelante. No es fácil conducir un país y menos cuando suceden estas cosas; él también es un ser humano, como todos nosotros, y necesita esperanza, aliento, fuerza para seguir. Es el momento de dar fuerza y aliento a quien nos conduce, nos guste o nos disguste, es lo que decidió la mayoría en el país.

Somos hermanos, es hora de ver a Ecuador unido trabajando por una sola causa, ayudar a nuestros hermanos caídos. Mandemos mensajes de solidaridad, de unión, de esperanza, de alegría por haber encontrado a un hermano con vida, mandemos mensajes de ver a la gente contenta recibiendo alimento, agua, ropa, etc. Esos mensajes son más satisfactorios que estar recibiendo mensajes de burlas, rencor y frustración.

Nuestra vida es Ecuador, luchemos por salir adelante y ayudemos a quien nos está guiando en este momento, que es quien más nos necesita.

Nuestra misión ahora es la unión de Ecuador, hagámoslo todos. Pongamos un grano de voluntad y podremos construir una montaña de esperanza e ilusión para nuestros hermanos caídos.

Gracias Ecuador, gracias hermanos del mundo. (O)

Dr. Alfredo Jalón Constante