El 16 de febrero de 1884 apareció el primer número como bisemanario los miércoles y sábados. La dirección estuvo a cargo de don Juan Emilio Murillo Miró. Han pasado 133 años.
El 17 de mayo de 1884 se publicó como bisemanario o interdiario los martes, jueves y sábados. El 16 de agosto de 1884 como vespertino todos los días, excepto los feriados. Desde julio de 1911 se convirtió en diario de la mañana todos los días del año. Este diario guayaquileño es el más antiguo del país y figura entre los de más edad en Latinoamérica.
EL TELÉGRAFO fue el precursor de la aviación y del correo en Ecuador. Su director de entonces, José Abel Castillo, compró en Italia en 1920 un biplano que bautizó con el nombre de Telégrafo I y contrató al valiente y experto piloto italiano Elia Liut para que lo condujera. Cruzó los Andes en magistral vuelo de Guayaquil a Cuenca, el 4 de noviembre de 1920. Voló luego por el callejón andino hasta Quito.
El Telégrafo I inició también el correo aéreo internacional en América, pues llevó de Ecuador a Colombia en 1921 la primera valija transportada por esta vía.
Una sección inolvidable de este diario fue El Telégrafo Literario (como ahora los es Cartón Piedra) en la que colaboraron Medardo Ángel Silva, Francisco Falquez Ampuero, Abel Romeo Castillo, Zaida Letty Castillo, María Piedad Castillo de Leví, entre otros. Tuvo grandes editorialistas, como Francisco Campos Coello, Nicolás Augusto González, Camilo Destruge, César Borja Lavayen, Justino Cornejo Vizcaíno, Ileana Espinel Cedeño, Bolívar Moyano.
EL TELÉGRAFO, decano de la prensa nacional, representa la tradición del diarismo guayaquileño. (O)
Lic. César Burgos Flor