Como enviado por la Divina Providencia, para salvar a los terrenales, aparece un predestinado, luego del exilio voluntario en Europa, con el típico talante de la burguesía en su prepotencia, despotricando contra el director de este diario con amenazas de enjuiciamento por el mal trato recibido por el titular de una noticia y “que lo llenó de indignación”. Qué miedo. Y con aires de perdonavidas, resuelve no aplicar la justicia porque no le da la regalada gana.
Los actos públicos de los hombres en la política no necesitan contrastación ni lloriqueos a los directores; todo el país vio la ridiculez de meterse en un canal de televisión para hacer la ‘lámpara’ de que es bien parado.
Es parte de la novela de los golpistas de la derecha para alardear en sus clubes de lujo saboreando un ‘on the rocks’ que se enfrentó a Correa. Enviar una carta al Director es nada más para que lo tomen en cuenta, ya que políticos mediocres pasan desapercibidos y solo son colmados de halagos por su círculo íntimo de amigos y familiares.
Ing. Salomón Fuentes Vidal, Esp.