Como una reunión de brujos, clarividentes, adivinos, cuenteros y chamulleros, actores políticos le están metiendo miedo a Lenín. Si no hace lo que ellos dicen, en sus extraviados presagios como aves de mal agüero, todo va a acabar en el infierno.
Allí están reunidos toditos, no falta nadie. Comenzaron reuniéndose con las cámaras para hablar dizque de la ‘moderna flexibilización laboral’; dirigentes de organizaciones obreras inexistentes que se saludan con efusivos golpecitos en la espalda con los traidores y los enemigos de clase.
Pero ahí están, reunidos esperando que desde el Pentágono les den luz verde para repetir la misma receta que le hicieron a Salvador Allende. Ya se les acabó el cuento del retorno de la derecha. La derecha es un fracaso en la región, y eso lo sabe la CIA, por lo que la táctica ahora es: amenazas, gritos histéricos en la Asamblea, recurrir a traidores como quintacolumnas e infiltrar ‘amigos’ que almuerzan con gringos, entusiasmados por ‘ayudar’ a Lenín.
Ante todo esto, solo la unidad. Fortaleza ideológica y profundización en el programa de la Revolución Ciudadana.
La lucha contra la corrupción es un tema al que no tenemos miedo, caiga quien caiga, la reacción (entiéndase la derecha) lo que menos nos puede enseñar es a combatir la corrupción, porque de ella nace, de la empresa privada, ¿o se olvidan de que Odebrecht es empresa privada y no fue que con la derecha se han hecho los mejores negocios? Adelante, Lenín, a profundizar la revolución.
Ing. Salomón Fuentes Vidal, Esp.