La verdad, señor Director, es que para manifestar el contenido de mi carta podría escoger algunos títulos, pero he seleccionado el más corto a fin de expresar mi rechazo total, que sin duda comparto con la gran mayoría de ecuatorianas y ecuatorianos a quienes nos repugna la actitud ridícula y vergonzosa de querer pagar un bolón o un encebollado con dinero electrónico. Si bien es cierto el dinero electrónico es un medio de pago, estoy seguro de que ninguna persona común y honesta se atrevería a pagar estos alimentos con este requisito, dizque para demostrar su tonta oposición al gobierno del economista Rafael Correa Delgado, quien en forma valiente y con profundo espíritu cívico decidió tomar esta medida económica a fin de algo aliviar la caída mundial de los precios del petróleo que como líder de la Revolución Ciudadana no descansa en visualizar y ejecutar cada día su proyecto político del Buen Vivir para todos los ecuatorianos. Ya que esta medida suma recursos para continuar la construcción de hospitales, centros y subcentros de salud, más carreteras de integración con todos los rincones de la patria, con parroquias que aún están olvidadas, puentes, puertos y aeropuertos, más escuelas del milenio, más universidades de calidad, más becas para estudiantes, cuantas más obras de beneficio social.

Sin embargo, la mayoría de medios de comunicación privados que dicen ser libres e independientes junto con reporteros que siempre han estado coqueteando con politiqueros de gobiernos retrógrados no saben qué hacer ni decir frente al gobierno de Alianza PAIS que cada vez se fortalece con el apoyo del pueblo convencido del cambio logrado por un gobierno de talla intelectual regional, que por su accionar ético y patriótico, Ecuador suena positivo en el mundo. Aunque desgraciadamente las castas políticas tradicionales nos han dado y ejecutado proyectos de anemia con amenaza de osteoporosis, pero en los 9 años de este gobierno el pueblo ecuatoriano se está recuperando sin hacer caso a tantas mentiras maliciosas como que Rafael Correa está metiendo la mano al bolsillo de los ecuatorianos, que no hay independencia de la justicia, que los Asambleístas son borregos sumisos del ejecutivo, que no hay libertad de expresión y de prensa.

Pero hablan y hacen lo que les la gana tal como un grupo de fantoches opositores fueron hasta la OEA a pedir que vengan a vigilar el proceso electoral desconociendo que somos un país soberano, como también ir a la CIDH a pedir y a quejarse que en Ecuador no hay libertad de expresión ni de prensa. Además, un banquero prepotente como poseedor de dinero en los paraísos fiscales que ya se cree presidente, dice que va a desaparecer la Senescyt y que va a privatizar la educación. Cosas como estas son igual de ridículas y vergonzosas como querer pagar bolones y un encebollado con dinero electrónico.

En fin, señor Director, la traición, la deslealtad presente en un personaje que incluso estuvo ocupando carteras con este Gobierno, que hoy está junto a envidiosos y ambiciosos opositores que se desbaratan al no ponerse de acuerdo al buscar la unidad, cada cual con el ánimo de figuretear; cada vez suman votos a favor de Alianza PAIS. (O)
 
Luis Calvas Ríos