La cual fue celebrada por muchos ecuatorianos desde el 15 de enero. Medios nacionales y extranjeros de todas las tendencias dedican sendos reportajes y artículos a aquello que el diario El País de España indica que va más allá de un eslogan y cita al historiador Juan Paz y Miño, quien expresa que esta revolución marca un nuevo ciclo en la historia del país porque rompió todo lo que se había hecho desde 1979 -cuando Ecuador retornó la democracia- hasta 2006. “Se superó la economía empresarial, la falta de institucionalidad del Estado, la acumulación de riqueza y la ingobernabilidad”.
Quiero analizar los resultados de estos siete años de gobierno del presidente Rafael Correa, no desde el punto de vista político ni desde la evaluación de la gran obra de infraestructura, salud y educación, sino desde la perspectiva de gerente profesional, y me voy a apoyar en la presentación empresarial del profesor Francisco Alemán, docente de la Espae-Espol y presidente del ingenio EQ2 sobre la situación económica del país 2014, basado en el Reporte de Competitividad Global y que tiene una visión optimista, pero además pragmática de la realidad nacional.
Ecuador ha mejorado 15 puestos en el Índice de Competitividad Global; en 2012 éramos 86 de 144 países, en 2013 somos 71 de 148; pero en los pasados 5 años hemos escalado 35 puestos, lo cual es sumamente notorio.
En cuanto a la calidad del esquema legal y administrativo del país, que es muy discutido y controversial, hemos avanzado del puesto 125 al 92, precisamente por la transparencia del sector privado. Mejora el enrolamiento y la calidad de la educación primaria y, por supuesto, la expectativa de vida. Tenemos mejor entrenamiento ejecutivo y hay mejoras en el sistema educativo superior. La calidad de intermediación bancaria se ha superado y está muy sofisticada con un amplio desarrollo del mercado financiero. Somos mucho más ágiles para adoptar tecnología productiva. Las redes de negocios son de mejor calidad, demostrando que hay efectivas estrategias empresariales. ¿Y quién lo iba a pensar?: en innovación pasamos del puesto 129 al 58.
Sin embargo, hay índices en los cuales hay muy poco crecimiento o aun estancamiento, los cuales van a ser prioridad en este y los próximos años. Así tenemos nuestra capacidad para producir una adecuada mezcla de bienes y servicios que se refleja en la eficiencia de dicho mercado que es muy pequeña, lo que nos mantiene todavía en la cola de los países. Avanzamos muy lentamente en el grado de flexibilidad laboral y prácticamente no hemos mejorado en cuanto al acceso a mercados foráneos.
Tenemos una economía saludable, aunque afectada en su crecimiento por una desaceleración que es regional.
El Gobierno prevé un muy buen año 2014 en el que entrarán en juego las variables del cambio de la matriz productiva y de sustitución de importaciones. Por eso, el profesor Alemán nos dejó a los empresarios dos preguntas: a) ¿Estamos construyendo empresas más competitivas mediante educación, preparación tecnológica, sofisticación de negocios e innovación?; y b) ¿Qué oportunidades de negocios tenemos en el modelo y entorno económico actual?