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El Telégrafo

Salario básico unificado para 2014

05 de enero de 2014

No hubo acuerdo entre trabajadores y empresarios convocados para el rito anual de concertar el salario mínimo, aunque esta vez estuvieron más cerca. Difícilmente llegarán a un consenso sobre el reparto de las ganancias.

Los trabajadores, que anhelan una remuneración justa por su trabajo, en la  ‘que se tomen en cuenta los índices de crecimiento que han tenido las empresas’, para 2014 esperaban un aumento de $ 30. Los empresarios, que solo quieren que ‘se tome en cuenta la inflación’, ofrecían un aumento de $ 17.

De ahí que el Gobierno venga interviniendo a favor del trabajador, con un incremento progresivo del salario básico unificado y el aumento de la capacidad adquisitiva de los ecuatorianos, teniendo en cuenta inflación y productividad.

Para este año ofreció 5 dólares más que los empleadores, aunque menos de lo esperado, pero aumentando el SBU en $ 22 a un total de $ 340, que con los salarios extras se eleva a $ 397, y a $ 425 con el fondo de reserva.

Hace 6 años una empleada doméstica ganaba $ 80, salario considerado justo por cierta burguesía, que arguye que si se sube el salario mínimo habría desempleo generalizado.
Las estadísticas del INEC muestran que el incremento de salario  no ha aumentado el desempleo.

Este, que era de 10,7% en 2006, bajó a 4,5% en 2013. Claro, hay empresas que aducen que tienen que despedir trabajadores, porque no es rentable si pagan salarios ‘altos’. Sin embargo, la mano de obra barata no debe ser factor de éxito empresarial. 

Ardua tarea la de disminuir las desigualdades por medio de la redistribución de la riqueza, tarea, sin embargo, impostergable. Y más cuando a la mujer se le paga menos que al varón.

A nivel global, según el informe de Intermon-Oxfan, las 100 personas más ricas del mundo, que en 2012 acumularon  240.000 millones de dólares de ingresos netos, podrían acabar 4 veces con la pobreza extrema.

De ahí que no baste con elevar el salario mínimo, habrá que intervenir también el salario máximo. Lo propuse hace un año en mi columna ‘2013 con salario digno’ (que sigue leída en internet con más de 9.200 visitas). Nada excesivo. Suiza, en un referéndum histórico, por  67,9% de los votos limitó el salario de los directivos de las grandes compañías y otros ‘paracaídas dorados’. Un directivo no podrá ganar más de 12 veces el salario de su empleado peor pagado. Solución: pague mejor salario.

Hay que socializar la idea de que la equidad y la justicia sean las que predominen en las relaciones laborales, y acabar con abusivas utilidades empresariales, sobre todo las del sistema financiero.

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