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El Telégrafo
Nancy Bravo de Ramsey

Mar para Bolivia con soberanía

07 de octubre de 2014

Algo inusitado ha sucedido entre un amplio grupo de chilenos, en relación con el delicado y enjundioso tema de la confrontación que existe entre el país del Sur y el Estado Plurinacional de Bolivia. Un hecho que llamó la atención de la comunidad internacional, cuando apenas comenzado este mes de octubre, dirigentes sindicales, así como representantes estudiantiles y de diversos grupos políticos de la nación de la estrella solitaria, viajaron a La Paz para entregar en manos del presidente de Bolivia, Evo Morales, un manifiesto mediante el cual, “miles de chilenos” le hacían conocer con el aval de sus firmas, lo que es su voluntad: “que Chile le devuelva a Bolivia sus tierras que le fueron arrebatadas” tras una guerra injusta que aconteció entre 1879 y 1883.

Este extraño acontecimiento, transmitido por Telesur el sábado 4 del presente -y repetido por diversos medios de comunicación escritos publicados en diferentes países-, despertó nuevamente en el concierto internacional el interés acerca de diversos aspectos de la Guerra del Pacífico, considerada por la delegación chilena como el “momento histórico que marca la pérdida del acceso al mar de Bolivia, que fue el resultado de la ambición desmedida del capital imperialista inglés instalado en las salitreras, de la genuflexión y complicidad de los gobernantes de Chile en esa época y de la falta de organización y conciencia de dos pueblos que fueron llevados a un enfrentamiento fratricida que terminó con miles de muertos”.

Desde entonces, “han pasado más de 132 años de desencuentros entre las dos naciones” -expresa el manifiesto-, durante los cuales cada una de ellas ha esgrimido diversos argumentos que se remontan a los tiempos de la Colonia, bajo el dominio de la corona de España, las creaciones del Virreinato del Río de La Plata, de las Reales Audiencias de Charcas, de Lima y de Santiago de Chile, pasando por los años de la independencia, las intervenciones de Simón Bolívar y de Antonio José de Sucre, dando a cada sector liberado los territorios correspondientes, hasta llegar a la conformación de las repúblicas de Chile, Bolivia y Perú, y en la actualidad hasta nuestros días, cuando la delegación de movimientos sociales de Chile reivindicó “una salida soberana al mar para Bolivia” y entregó a Evo Morales un histórico manifiesto, durante la reunión que mantuvo con él en la sede del Gobierno. Pilar Herrera, vocera del grupo visitante, puso además en manos del primer magistrado boliviano, copia de una comunicación enviada en agosto a la presidenta de Chile, Michelle Bachelet, suscrita por medio centenar de personalidades académicas, culturales y sociales, así como por más de 300 líderes sindicales y de movimientos sociales de Chile, abogando por “iniciar un diálogo fructífero con el Gobierno boliviano, para buscar una solución digna y en justicia al enclaustramiento”, asegura el diario www.lostiempos.com

A su vez, el presidente Evo Morales, que ha marcado nuevos rumbos para Bolivia en diferentes aspectos, demandó a Chile ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya, el 24 de abril de 2013, con el fin de que emita un fallo que obligue a Santiago a volver a las negociaciones sobre la salida soberana al mar. Chile tiene plazo hasta el 18 de febrero de 2015, para responder a los argumentos históricos y jurídicos expuestos por Bolivia, que en la Guerra del Pacífico perdió 120.000 km² de su territorio y 400 km de costa, ahora ocupados por la nación del Sur. En esas tierras arrebatadas a Bolivia como consecuencia de esa conflagración armada, se encontraban -entre otras- el antiguo departamento del Litoral, actualmente, parte de la región chilena de Antofagasta y Arica. Pero existe un antecedente a la visita del grupo de chilenos a La Paz. Cuando Evo Morales llegó a Chile para asistir a la asunción al poder de Michelle Bachelet, durante un acto organizado en el Court Central del Estadio Nacional, los 5.000 asistentes corearon el grito: “Mar para Bolivia”.

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