Estados Unidos está temblando… Pero a decir verdad es tan solo su gobierno el que se encuentra seriamente preocupado, pues una gran mayoría del pueblo estadounidense defiende los principios de justicia, equidad y democracia, repudiando de diversas formas la desvergonzada, inmoral y manipuladora política exterior de sus representantes, quienes suman a su favor el apoyo de un buen número de parlamentarios, banqueros, generales del Ejército y dueños de la industria armamentista.
El proceso revolucionario y de unidad de las naciones del sur del continente le está quitando el sueño a los gobernantes del norte. Tan convencidos como estaban ellos de que son los dueños de nuestros países y de todo lo que contienen, como el petróleo, las minas, los recursos acuíferos, las riquezas existentes en los fondos marinos. Así creían y se habían acostumbrado a quitar gobernantes elegidos en justos procesos electorales, ya fuere mediante un bien planificado golpe de Estado o una invasión de ‘rebeldes’, mercenarios pagados, armados y adiestrados por ellos, o recurriendo al asesinato sin mayor espera, a fin de instalar de inmediato a un gobernante títere que obedeciera sus órdenes.
Ya desde el gobierno de Hugo Chávez, la oposición pagada y organizada por Estados Unidos hizo de las suyas en la patria de Bolívar.Siempre las cosas se les facilitaron mucho más a Estados Unidos con la ayuda de los vendepatria que encontraron en cada una de las naciones seleccionadas para disponer de sus riquezas y de su soberanía. Traidores a su patria no les ha sido difícil encontrar a los dueños del mundo. Gente sin conciencia ni escrúpulos, que jamás se ha preocupado por los destinos de su nación, sino que ha funcionado por el afán de la toma del poder y de recibir ingentes cantidades de dinero, a cambio de una obediencia servil. Con frecuencia ha encontrado Estados Unidos un traidor que les ha facilitado su decisión de apoderarse de lo ajeno. Así sucedió en Cuba, en Ecuador, en Honduras, en Paraguay, en Chile, en Panamá y ahora en Venezuela, país que es dueño de la mayor reserva de petróleo del mundo, así como de inmensos depósitos naturales de agua dulce subterránea, lo que significa una tentación para la voracidad norteamericana.
Ya desde el gobierno de Hugo Chávez, la oposición pagada y organizada por Estados Unidos hizo de las suyas en la patria de Bolívar. Y actualmente no descansa en su empeño por gestar un golpe de Estado que se ha venido prolongando durante varias semanas, interesada en sembrar el caos en varias ciudades, además de Caracas, y volver ingobernable a la nación. Henrique Capriles, el candidato perdedor de las últimas elecciones presidenciales y actual gobernador del estado de Miranda; el exalcalde de Chacao, Leopoldo López, y la diputada Corina Machado aparecen como las figuras principales de la oposición venezolana y han sido calificados como mercenarios del fascismo por el presidente Maduro.
Sin embargo, no todo es color de rosa en el lado opositor, pues hasta ahora no ofrecen una estrategia política, entrampándose eso sí en una violencia sin tregua, con novedades alarmantes, como lo sucedido recientemente en la cárcel donde se encuentra detenido Leopoldo López y hasta donde trataron de darle diversos mapas relacionados con las instalaciones petroleras de Venezuela. ¿A quién iban a ser entregados esos planos y con qué propósito?