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El Telégrafo

La península de Santa Elena y las obras hidráulicas

27 de noviembre de 2012

La estrategia de construir albarradas para el almacenamiento del agua dulce para permanecer en zonas áridas como las de la península de Santa Elena fue conocida por nuestros antepasados, logrando vivir adecuadamente en equilibrio con las condiciones ecológicas del medio.

En la década del 70, la Cedegé (entidad de desarrollo desaparecida), en la región de Tugaduaja de la indicada península, investigó la producción con limitada dotación hídrica de cultivos con mercado para los consumos selectivos hoteleros y potencialmente exportables. El agua se obtuvo mediante la instalación de un pozo de agua somera.

Los resultados fueron promisorios en calidad y diversidad, no obstante hubo la oferta de una flota de tanqueros para comprar el agua a un precio mayor al que habíamos obtenido con el trabajo y los comuneros dueños de los terrenos reivindicaron el pozo para vender el agua a los tanqueros.

Esta lección práctica de oportunidad financiera nos indicaba que el valor del agua era más alto que el obtenido con la producción agrícola, pero así mismo que la península de Santa Elena, región árida provista de agua, era promisoriamente agrícola y genera trabajo productivo permanente, para potenciar la producción industrial y el desarrollo turístico de la región.

Con la finalidad de proveer el agua, recurso vital para el desarrollo integral de la península, se construyó una de las obras de infraestructura hidráulica más importantes realizadas en el Ecuador, el trasvase del agua del río Daule, para almacenarla en la represa Chongón para su distribución.

El embalse tiene una capacidad de almacenamiento de 280 millones de m³, el área de riego prevista es de  42.000 hectáreas. Las inversiones del Estado para la construcción de la primera etapa del proyecto superó los 360 millones de dólares.

La superficie del Proyecto Agrícola, en  su primera etapa, es de 4.556 hectáreas con drenaje y riego presurizado, constituye una de las obras de riego completas construidas por el Estado.

Se puso en servicio en la década del 80, época en la cual las políticas neoliberales ponían énfasis en la reducción de la intervención del Estado y privatizando las actividades de desarrollo y eliminando la presencia de las organizaciones campesinas, como son las comunas.

Estudios realizados establecen cómo la información sobre los beneficios fue proporcionada asimétricamente favoreciendo la concentración de la propiedad en pocas manos.

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