Publicidad

Ecuador, 28 de Septiembre de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo

Guerras por petrodólares

12 de septiembre de 2013

Actualmente se demandan unos 90 millones de barriles de petróleo al día, que a un precio promedio de 100 dólares el barril dan 9 mil millones de dólares diarios y con los diferentes procesos de refinamiento y producción llegan a 18 mil millones de dólares, es decir, 6,5 billones de dólares anuales. En esta dinámica, pregunto: ¿puede interesar a Estados Unidos un petróleo barato? Una prueba lo da el hecho de que antes de la invasión a Irak hace 10 años, el petróleo fluctuaba entre los 20 y 25 dólares por barril. Esto es muy conveniente para Estados Unidos, dado que, mientras mayor sea el precio del petróleo, mayor es la demanda de dólares.

Un hecho que tiende a olvidarse es que antes de la guerra de Irak, Saddam Hussein quería negociar su petróleo con Europa en euros. El 24 de septiembre de 2000, el gobierno de Hussein señaló que Irak comenzaba la transición de sus exportaciones de petróleo de dólares a euros. Él estaba resentido con EE.UU. por la primera guerra del Golfo Pérsico de 1990. Esta guerra ideada por la administración de George Bush padre fue la primera guerra de los petrodólares. Luego vendrían muchas más  por petróleo, y hay una que está en pleno desarrollo con la crisis de Siria. Cada guerra despliega las más recientes innovaciones de la industria de armamentos y hay que dar uso a estos para justificar su enorme presupuesto.

La estrategia económica y geopolítica de los petrodólares ha sido una de las argucias más brillantes de la historia reciente, que ha permitido dar a Estados Unidos el predominio absoluto de la economía mundial. Los 6,5 billones de dólares que se mueven anualmente por el petróleo representan casi el 10% del PIB mundial y el 40% del PIB de EE.UU. Cada vez que algún país petrolero manifiesta su intención de salirse del sistema petrodólar (como Irán, Siria o Venezuela) pasa a formar parte del llamado “eje del mal”, y el Gobierno de Estados Unidos se encargará de reinstaurar el orden por medio de la fuerza.

En los últimos años, varios países han manifestado su intención de utilizar sus propias monedas para el intercambio petrolero, como por ejemplo India, China y Rusia.

A medida que otros países busquen alejarse del sistema de petrodólares y materialicen la idea de Hussein de transar el principal recurso energético mundial en monedas alternativas, el dólar proseguirá su lento pero persistente declive. Por ello se esperan fuertes presiones inflacionarias por el petróleo y también numerosas tensiones bélicas en torno a los países petroleros patrocinadas por los Estados Unidos.

A 40 años de su instauración, el sistema de los petrodólares acusa fatiga crónica y nadie puede asegurar que EE.UU. siga siendo la democracia responsable que prometía ser al final de la Segunda Guerra Mundial. La historia se ha encargado de demostrar que ningún sistema es eterno, y el posible colapso del sistema de petróleo por dólares mantiene muy nerviosas a las autoridades de la Reserva Federal.

Contenido externo patrocinado