Estar en el corazón de una ciudad, sea por su modernidad, centro histórico o la sencillez de sus edificios, siempre amerita disparar unas fotos, que pueden ir a parar en el FB o en un medio de comunicación especializado en viajes y turismo. ¿Qué marcará el destino de la foto? Lo limpio que esté el paisaje o el escenario citadino.
La mayoría de ciudades europeas es fácil de fotografiar por ello su abundante difusión, no hay elementos desagradables que contaminen la foto, especialmente vehículos y líneas de electricidad.
En Ecuador, es difícil conseguir una foto de portada en el centro de nuestras hermosas ciudades, convertidas en gigantescos parqueaderos tarifados. El camino fácil y poco práctico de muchos municipios ha sido quitar espacio a los ciudadanos en beneficio de los vehículos.
Los centros de las ciudades no son aptos para ser fotografiados, debido a la hileras interminables de automotores de todo tipo de formas, colores y tamaños.
De poco sirve que los edificios estén preservados, pintados y bien presentados, si las hileras de autos tapan, distorsionan y devalúan la imagen a ras del suelo, en tanto los cables de energía contaminan visualmente la parte alta.
Coches acercándose peligrosamente a los transeúntes no son un aliciente para el turista, amenazado todo el tiempo por automotores que invaden las veredas, así las llantas estén en el pavimento.
En vez de tarifar las calles es mejor motivar a los ciudadanos a invertir en parqueaderos privados, que permitan limpiar visualmente las calles y brindar seguridad a los caminantes, sean residentes o visitantes. Ninguna ciudad con sus calles llenas de vehículos estacionados permanentemente junto a las veredas puede decir que es turística o que tiene intenciones de serlo.
En España los parqueaderos están tecnificados con todo tipo de comodidad y seguridad. Se puede reservar un espacio por internet y rentar una habitación en un hotel cercano en pleno centro histórico, dejarlo ahí por unas horas o por varios días, mientras se disfruta de los atractivos de la ciudad, que es fotografiada en toda su belleza, imágenes que circularán por todo el planeta constituyendo la publicidad más eficiente.
En Ecuador, los municipios deben empezar a limpiar nuestras calles, a recuperar los espacios para los humanos y dar seguridad a los transeúntes. Mientras los centros de las ciudades sigan llenos de vehículos, mal pueden los alcaldes decir que están aportando al turismo; al contrario, la tarifación amenaza al turista y ahuyenta el turismo.