El domingo pasado se llevó a cabo la tercera válida por el Campeonato Mundial de Fórmula 1, el Gran Premio de China, disputado en el circuito de Shanghái. Tercera carrera y tercer ganador distinto; esta vez fue el turno de Fernando Alonso con su Ferrari en una carrera en la que no faltaron emociones gracias a las diferentes estrategias optadas por los pilotos y escuderías, y por los innumerables adelantamientos que tuvimos.
Primera victoria de Alonso en 9 meses desde el G.P. de Alemania 2012, y la número 31 para él en F1 igualando así a Nigel Mansell, quedando solo detrás de las 91 victorias de M. Schumacher, las 51 de A. Prost, y las 41 de A. Senna.
Un triunfo contundente el del piloto español que de esta forma se tomó una revancha personal después del error que cometió hace 3 semanas en el arranque del G.P. de Malasia, cuando se topó con Sebastian Vettel y que a la postre le evitó sumar valiosos puntos. Una estrategia perfecta, paradas en pits perfectas, su Ferrari que no castigó los neumáticos, por lo tanto permitiéndole un muy buen ritmo de carrera a Fernando con lo cual el español fue impecable e intocable desde la 4ta vuelta en que pasó a Hamilton. De ahí en más, imposible seguirle el tren de carrera.
Esto, al contrario de Felipe Massa, que de igual forma tuvo un excelente arranque, saltó del 5to al 3er puesto, y al igual que Alonso, en el 4to giro también pasó a Hamilton pero, a partir de la primera parada en pits los neumáticos duros no le cayeron bien a su Ferrari. Las llantas empezaron a hacer “graining”, es decir “ampollas”.
¿Será entonces una diferente puesta a punto del auto, con respecto al de Alonso, lo que lo perjudicó? ¿O que las llantas duras no van con el estilo de manejo de Felipe? En fin, eso deberán analizarlo “casa adentro”, pero el hecho es que el ritmo de Massa se cayó dramáticamente para terminar solo 6to y a más de 40 segundos de Alonso. Eso simplemente no es normal. En todo caso, el nuevo Ferrari F- 138 definitivamente está para pelear el campeonato este año, al menos en manos de Alonso, por lo pronto…
Por el lado de Lotus, Kimi Raikkonen ganador en Australia, una decepcionante 7ma posición en Malasia, producto de un muy mal arranque de carrera, lo cual Kimi volvió a repetir en China. De 2do en la grilla cayó al 4to en la partida para volver a “remar” hacia el 2do puesto nuevamente tras un duelo sensacional y que duró toda la carrera con el Mercedes de Lewis Hamilton, cuya “pole position” fue solo un espejismo para las Flechas de Plata, es decir, el auto es competitivo pero no lo suficiente, todavía, para pensar en ganar bajo circunstancias normales de carrera.
En Shanghái vimos que el Mercedes castiga demasiado las llantas, se acaban antes de lo que se les acaban a los Ferrari y a los Lotus, por ejemplo. Por lo tanto, el buen ritmo de carrera pronto decae. Así, entonces, el 3er puesto es lo mejor a lo que pudo aspirar Hamilton el domingo, mientras que su coequipero Nico Rosberg, el ganador en China el año pasado, otra vez tuvo que abandonar, en esta ocasión debido a la rotura de la barra estabilizadora de su bólido.
Por el lado de Red Bull, un fin de semana sin duda difícil para la escudería austríaca. Lo de Webber: ¡patético! Primero el sábado quedándose sin combustible en plena clasificación, por consiguiente, obligado a largar último; y ya en carrera le ajustan mal el perno central de la rueda trasera derecha tras una de las paradas en pits y Webber se queda en 3 llantas al regresar a la posta, por lo tanto obligado a abandonar. Y en lo que se refiere a Sebastian Vettel, una mala clasificación el sábado que le forzó a largar 9no para terminar el Gran Premio en 4to puesto, que con una vuelta más de carrera, bien pudo ser el 2do gracias a una diferente estrategia al arrancar con llantas duras para montar las suaves al final, es decir, totalmente lo opuesto a lo que hicieron los demás pilotos punteros, una estrategia por la que también optó Jenson Button a más de parar solo 2 veces en pits a cambiar llantas a diferencia de las 3 detenciones de la mayoría y que le permitió al campeón 2009 finalizar en 5to lugar luego de arrancar desde 8vo.
Algo ha mejorado Mclaren, pero todavía está muy lejos de la punta, incluso lejos del podio, puesto que, para su coequipero Sergio Pérez, hasta entrar en los puntos es complicado, el domingo solo pudo ser onceavo. Definitivamente que hay mucho trabajo para los ingenieros y técnicos de Mclaren para enderezar la barra. Hoy por hoy, no son más que la 5ta fuerza. Finalmente una mención especial para el 7mo puesto obtenido por el joven australiano Daniel Ricciardo al volante de su Toro Roso, que de esta manera obtiene sus primeros puntos esta temporada. Un resultado importante considerando que Ricciardo podría ser el remplazo de Webber el próximo año, en Red Bull.
A semana seguida se nos viene el Gran Premio de Barhein. ¡Hasta entonces!