Publicidad

Ecuador, 27 de Septiembre de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo

Ética periodística

20 de junio de 2013

A propósito de la Cumbre para un periodismo responsable (Cupre), que se desarrolla desde ayer en Guayaquil, conviene destacar que la labor periodística representa la voz que comunica y busca concienciar a la sociedad acerca de su situación actual en diferentes aspectos.

En función de ese rol que cumple el periodista, es un deber de la sociedad asegurar una amplia libertad de expresión, no solo a los medios y sus periodistas sino a sus fuentes, así como el derecho a la información que tiene el pueblo. Sin embargo, el fenómeno de la globalización y la concentración de la propiedad de los medios, así como el influjo de los poderes fácticos de diversa naturaleza, pueden constituirse en un riesgo para el ejercicio de esos derechos. Así, como no existe verdadera libertad de expresión sin una pluralidad de medios y fuentes que puedan expresarse, no está garantizado el correcto funcionamiento de la base material de esta libertad sin un adecuado marco de conducta ética de la prensa.

En este contexto, vale recordar los principales temas puntualizados en el código de ética periodística elaborado por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, Ciencia y Cultura (Unesco), que abarca y da sustento a la convicción de que el periodista debe ofrecer un servicio escrupuloso y limpio de toda corrupción, debido al compromiso social que conlleva su oficio.

El primer asunto planteado es “el derecho del pueblo a una información veraz”, lo que implica que el periodista debe someterse a brindar informaciones -a la comunidad- que tengan sustento y veracidad, evitando caer en el sensacionalismo que muchas veces altera los hechos.

Otro tema cubierto en el código es la “responsabilidad social del periodista”. Como se ha mencionado antes, en el trabajo periodístico la información no constituye un simple producto; supone fundamentalmente un bien público, por lo que el comunicador social debe responsabilizarse por la información que facilita a la gente y hacer que  llegue con claridad, imparcialidad y objetividad.

“El respeto a la vida privada y a la dignidad del hombre” es otro punto que se debe valorar a la hora de realizar una buena y honrada labor de comunicador. Es de profesionales saber qué límites no se debe sobrepasar al desempeñar un oficio; sobre todo, el respeto a la dignidad de las personas debe ser de mayor peso ante cualquier situación, para no caer en malas prácticas, como la difamación, la calumnia, la injuria y la insinuación maliciosa.

“El respeto de los valores universales y la diversidad de las culturas” es un punto correlativo a una infinidad de aspectos de carácter humanista. Todo periodista debe mantener una actitud que defienda valores, como la paz, la democracia, los derechos del hombre, el progreso social y la liberación nacional, a la vez respetando el valor y la dignidad correspondiente a cada cultura, y del hecho de que cada pueblo es libre de escoger y desarrollar sus sistemas políticos, económicos, sociales y culturales.

Contenido externo patrocinado