Lo que antes veíamos con la boca abierta, admirando afuera las maravillas del mundo, hoy sabemos que siempre estuvo aquí entre nosotros, en medio de nuestra geografía subdesarrollada, condenada por el capitalismo salvaje a cumplir el papel de meros productores de materias primas de la gran factoría imperialista. Aquí estuvo siempre el más hermoso paisaje del planeta, solo faltó que levantemos la autoestima de un país rico en potencialidades, secuestrado por los logreros neoliberales que nos entregaron maniatados a la voracidad del imperio.
Faltó la decisión del soberano para enderezar la triste ruta de nuestra sumisión a perversas estructuras de despojo y servilismo hacia el cambio y dejar atrás esa ignominia. Allí está la belleza de la naturaleza, rica en los más variados ecosistemas, con una extraordinaria fauna y flora que han maravillado al mundo, tanto que nos incluyen en el itinerario del turismo a gran escala. ‘All you need is Ecuador’, para que vengan de los cinco continentes a disfrutar de un país dispuesto a convertir el turismo en un eficiente potencial de desarrollo, sin riesgo de contaminación con las chimeneas del egoísmo macroindustrial que provocaron el holocausto del calentamiento global. En un pequeño pañuelito de la geografía mundial se concentran todos los microclimas en cuatro regiones donde se expresa la mayor diversidad de plantas y animales, especialmente de aves.
Hace siete años era imposible imaginar que Ecuador iba a inscribirse al mundo con la oferta sostenida del más atractivo paquete turístico. La monumental infraestructura vial construida por la Revolución Ciudadana puso al alcance del turista nacional y extranjero los más recónditos, paradisíacos y exóticos lugares que interesan a la retina de los visitantes que, subyugados por la belleza de lo nuestro, deciden instalarse de por vida entre nosotros. El filón turístico es parte del cambio de época que ha despertado el interés de los centros turísticos del planeta, tanto que 7 de nuestras ciudades forman parte de los 19 puntos globales elegidos para la gigantesca promoción turística que ha conmovido al mundo.
Agreguemos la calidad humana de la gente que debe entender que el turismo es nuestra responsabilidad para asegurar el destino de los viajeros hacia este Ecuador incluyente y solidario, protagonista de una auténtica revolución para el socialismo del siglo XXI.