Ayer viajaron a Asunción (Paraguay) los equipos nacionales de damas y varones que participarán en el Campeonato Sudamericano Infantil, categoría 12 años. Los seleccionados son los tres mejores del ranking nacional, tanto en la rama masculina como en la femenina.
El equipo de damas está conformado por las guayaquileñas Mikaela Johnson, Fiorella Boloña y Francesca Lilliegren. Su capitán será Carlos Avellán, quien aportará la experiencia que adquirió durante ocho años como jugador de Copa Davis y que ahora se dedica de lleno a la enseñanza, después de que se retiró del tenis profesional en 2009.
Los varones serán dirigidos por el profesor Luis Ruiz, quien ya ha dirigido a otros equipos ecuatorianos en categorías infantiles y conoce muy bien a los jugadores de su equipo, que son los guayaquileños Ricardo Albán, Óscar Mendoza y el manabita Raúl Centeno.
Los ecuatorianos tendrán dos días para adaptarse a las canchas, pelotas y condiciones climáticas, antes del comienzo del torneo previsto para el lunes 4 de noviembre, en las instalaciones del Rakiura Resort, ubicado en las afueras de Asunción.
Participarán 10 países: Argentina, Brasil, Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela.
Los cabezas de serie en damas serán: Argentina, Perú, Paraguay y Colombia; y en varones, Argentina, Chile, Colombia y Brasil.
Se jugará en dos grupos integrados por cinco países cada uno, con dos cabezas de serie por grupo. Los primeros de cada grupo disputarán la final, mientras los segundos jugarán por el tercero y cuarto puesto, y así sucesivamente hasta el noveno y décimo puesto.
En cada serie se jugarán dos partidos de singles y uno de dobles e independientemente de los resultados, todas las selecciones participarán en un total de cinco series en seis días de competencia, es decir que todos tendrán un día de descanso.
Los campeonatos sudamericanos categoría 12 años se juegan desde 2006, pues anteriormente se jugaban solamente a partir de la categoría 14 años.
La opinión de los dirigentes en épocas pasadas era que los niños de 12 años no estaban listos, no tenían la madurez emocional para competir y que podía causar más daño que beneficio en el desarrollo deportivo y personal de los chicos y chicas. Pero esos criterios han cambiado desde hace algunos años y vemos que actualmente los niños empiezan el aprendizaje y la competencia a edades cada vez más tempranas.
En mi opinión, este torneo aportará una experiencia muy valiosa para los jóvenes tenistas, pues les dará la oportunidad de medirse a los mejores jugadores sudamericanos, tendrán el honor y sentirán el orgullo de defender los colores del Ecuador por primera vez, de ser parte de un equipo, algo cotidiano para niños que juegan deportes colectivos, como el fútbol o el baloncesto, pero que en un deporte individual, como el tenis, se da en contadas ocasiones.
Tendrán la oportunidad de recibir durante los partidos las instrucciones y enseñanzas de los capitanes, situación que tampoco se da en torneos individuales, donde se prohíbe a los entrenadores dar indicaciones durante el desarrollo del juego.
Todos los participantes van con el mismo objetivo: ganar y ser campeones, pero hay que tener en cuenta que a esa edad los niños y niñas están apenas iniciando sus carreras deportivas y tanto padres como entrenadores deben tener mucha calma y paciencia en la manera de guiar, aconsejar o hacer alguna observación a los pequeños tenistas.
En esta etapa lo más importante es ir desarrollando una buena técnica, una actitud positiva dentro y fuera de la cancha, que el entrenamiento y la competencia sea algo de lo que disfruten, así como también es muy importante ir creando amistades con chicos de su misma edad que comparten muchas de sus mismas metas, sus mismos sueños y ambiciones.
No debe haber un enfoque obsesivo en los resultados, sino más bien en la formación, aunque esto a veces se torna difícil debido a las expectativas que se generan por parte de padres y entrenadores en torno a determinado jugador o jugadora.
Ha habido muchos casos de chicos y chicas que en esta categoría han sido señalados por entrenadores y padres como futuros campeones y que, por ser sometidos a una presión excesiva, terminan por abandonar la práctica del deporte.
Ecuador estará muy bien representado con chicos y chicas que tienen muchas ganas de dejar el nombre de nuestro país en alto en tierras paraguayas. Recuerden esos nombres porque seguramente veremos a uno o más jugando Copa Davis y Copa Federación por Ecuador.
Éxitos a los capitanes, jugadores y jugadoras. Y arriba Ecuador.