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El Telégrafo

El agua y el banano en la península

04 de diciembre de 2012

La península de Santa Elena es una región árida y carente de agua, sin embargo ahora es promisoria la actividad agrícola gracias a la construcción del trasvase que permite captar agua del río Daule para depositarla en el embalse de la represa Chongón que tiene una capacidad de almacenamiento de 280 millones de metros cúbicos (m³) de agua para distribuirla en sus diferentes usos.

Esta obra ha permitido el cultivo del banano pudiéndose observar siguiendo la ruta del canal de distribución del agua las plantaciones a partir de Cerecita y Zapotal se calcula en 5.000 hectáreas (ha) la superficie sembrada. El banano es un cultivo que se desarrolla favorablemente en condiciones bioclimáticas que corresponden ecológicamente a las características de bosque húmedo tropical con temperaturas promedio de 24°C a 25°C (siendo limitantes para su crecimiento temperaturas menores a los 18°C) y pluviosidad anual de 2.000 m.m. Estas condiciones son diferentes a las desérticas de la península.

Los expertos del cultivo consideran como mínimo de agua contar con 100 m³ por semana y por hectárea. La oferta ecológica que en términos simples constituyen las ventajas ambientales con las que cuenta el cultivo, como son suelos, clima, luminosidad de donde proviene la energía y síntesis de elementos que dan como resultado la producción y de ella dependerá su sostenibilidad económica.

Cuando los cultivos no cuentan con estas condiciones naturales favorables, se  tiene que recurrir a la compra de energía y tecnología, cuya adquisición es costosa, incidiendo de manera gravosa financieramente en la producción. La limitación ecológica sobresaliente para el desarrollo agrícola de la península de Santa Elena es el agua.

La huella hídrica es un indicador del consumo de agua, su cálculo toma en consideración el uso indirecto y directo en la producción de bienes y servicios. En este caso correspondería al volumen de agua consumida, evaporada o contaminada, por la producción y exportación del banano.

Este valor para Colombia corresponde a 483 m³ por tonelada de producción de banano, si lo aceptamos aproximadamente como válido para nuestras condiciones, significaría 53 millones de m³; si recordamos que la rigidez de nuestra capacidad de almacenamiento es de 280 millones de m³, nos estará indicando la urgencia de contar con esta información en regiones críticas como las de la península para administrar este bien en beneficio de todos y mantener eficientemente el servicio.

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