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El Telégrafo
Guido Calderón

Cómo ser un municipio turístico

20 de abril de 2014

Viajar por todo el mundo visitando ciudades que tienen en el turismo su mayor actividad económica y dialogando con sus alcaldes,  marca pautas y  actividades que permiten esbozar sugerencias a los nuevos alcaldes de Ecuador -en especial de cantones pequeños-, si desean hacer una gestión turística.

Un acuerdo entre el sector privado y el Cabildo es imprescindible. Mecanismos de diálogo permanente con sectores y actores sociales -más allá de hoteleros y turoperadores- que incluyan  al sector comercial e industrial, es la vía para plantear un turismo incluyente y sostenible. Control del tránsito con respeto al peatón y limpieza en la calles es lo primero.

Al igual que un país, una ciudad crece no solo por el dinero que ingresa, sino por el que se queda dentro. Fomentar y capacitar la transformación de la producción agrícola ganadera en productos locales crea identidad, enriquece la gastronomía, evita la salida de dinero, crea empleo; se debe impulsar la elaboración de productos industriales que reemplacen a los ‘importados’ de otras ciudades, como lácteos, gaseosas, aguas embotelladas, embutidos.

Un gran atractivo es necesario, embaular un río que cruza la ciudad, a más de paisaje y sitio de actividades como rafting, kayakismo, botes de alquiler, etc., crea un entorno de muchos restaurantes y bares; un malecón, un muelle en la laguna, son escenarios que no se pueden evitar, el ser humano tiene pasión por el agua. Un mirador en la colina con patio de comidas. Las grandes esculturas ya no convocan tantas fotos, pero sí las de personajes en tamaño natural, en posiciones casuales en una calle.

Ampliar veredas incluyendo sitios de sombra y descanso, peatonizar una o dos cuadras centrales, grandes escenarios, centros de convenciones, son básicos para crecer. Los teleféricos son un atractivo y un transporte alternativo -y ecológico- a sectores periféricos.

En ciertas fechas vestir a la ciudad -y sus habitantes- con un tema específico, como hacer la Navidad más larga, la fiesta de pascua de 40 días, el carnaval de un mes, el festival del queso, la feria del aguardiente, el chocofest, son propuestas que convocan y donde todos participan y ganan.

Visionar turísticamente su ciudad como un ‘país independiente’ abrirá muchos caminos al progreso; hay que mirar los atractivos de los vecinos para vender una ‘ruta’, así el turista tiene más motivos para venir y acceder a sus nuevas propuestas en función de los potenciales de su cantón; y tenga la seguridad de que hay muchos, pero el verlos desde niños a veces nos impide reconocerlos.

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