Publicidad

Ecuador, 02 de Octubre de 2024
Ecuador Continental: 12:34
Ecuador Insular: 11:34
El Telégrafo
Konstantin Eggert

La ciberguerra acaba de empezar

04 de marzo de 2019

Según The Washington Post, el día de las elecciones de medio término de EE.UU. en noviembre, el recientemente establecido Comando Cibernético del Ejército de EE.UU. bloqueó completamente los servicios de internet a la Agencia de Investigación de Internet en San Petersburgo, más conocida como la fábrica de trolls del Kremlin.

Se dice que la agencia está financiada por Yevgeny Prigozhin, un multimillonario que se cree que es cercano a Vladimir Putin. También se cree que es el principal patrocinador de los mercenarios rusos en el este de Ucrania, Siria y África.   

La agencia -que, según se informa, está detrás de la interferencia de Rusia en las elecciones presidenciales de 2016 en Estados Unidos, así como de una serie de otras actividades maliciosas en el ciberespacio occidental- estuvo completamente bloqueada, lo que provocó confusión y pánico entre sus directivos, según publicó el diario estadounidense.  

Putin ha considerado durante mucho tiempo que Occidente no es débil, sino que asume una actitud defensiva. Siempre logró estar un paso por delante, ya sea en 2008 en Georgia, 2014 en Ucrania, 2015 en Siria o 2016 en los Estados Unidos. Si el informe del Washington Post es correcto, entonces la Casa Blanca de Trump decidió darle vuelta la tortilla al Kremlin dando el primer golpe. Esto debe haberle dado a Putin una pausa para pensar.

Pero no esperemos que retroceda. La idea de una retirada táctica rara vez, o nunca, está en su mente. Eso sería mostrar debilidad. Putin ve el mundo en términos altamente personalizados. Considerará la publicidad dada al ataque como una humillación deliberada por parte de Washington.

Esto no significa que ordenará a sus tropas cibernéticas que ataquen instantáneamente a Estados Unidos.

El hombre fuerte ruso nunca se abalanza de inmediato ni de la misma manera. Y aunque Trump ha depuesto a Putin como el campeón mundial de lo impredecible, el ruso todavía es considerado un maestro de las sorpresas geopolíticas.  

Un objetivo clave podría ser la elección presidencial en Ucrania del 31 de marzo. Sembrar un verdadero caos en el país que ya ha invadido será más fácil que hacerlo en EE.UU. (O) Tomado de la DW    

Contenido externo patrocinado