Fue la mayor exhortación de Rafael Correa en la III Convención del Movimiento Alianza PAIS realizada en Cuenca, para aprobar más de 11.000 candidaturas para alcaldes, prefectos, viceprefectos, concejales y miembros de las juntas parroquiales, principales y alternos, que terciarán en las elecciones de febrero de 2014.
Esto constituye un reto para millones de ecuatorianos que han apoyado los cambios en 6 elecciones y 3 consultas populares y para Alianza PAIS, movimiento que cuenta con más de un millón de adherentes; sobre todo para los sectores más avanzados que bien conocen que ese objetivo no solo implica organizarse bien y actuar unitariamente para triunfar electoralmente, difundiendo las ideas fuerza del programa y que deben, con los aliados en Guayas, Manabí, El Oro, Chimborazo, Santa Elena, Pastaza y otros territorios, desarrollar acciones conjuntas en la campaña y luego cogestionar en beneficio de las comunidades.
También se debe ajustar la política de alianzas, buscando incorporar al proceso, de forma permanente a movimientos sociales diversos, gremios y agrupaciones que apoyan la RC; ponderar en justos términos las propuestas focalizadas en territorios, desechando posiciones puramente electoreras, utilitarias o de figuración personal. Por fin, organizar al pueblo para impulsarla y defenderla y ejecutar obras y programas, coordinando con el Gobierno, a fin de resolver los diversos y graves problemas de la población.
No es posible una buena gestión de las prefecturas y alcaldías, sin que se logre el apoyo del Estado y del Gobierno, sobre todo en los ámbitos de servicios e infraestructura básica, recuperación del medio ambiente contaminado, desarrollo del turismo, vivienda social, salud y educación de calidad y apoyo a las actividades productivas.
Esta comprensión es importante en los momentos políticos que vive el país.
También resaltó la presencia de la juventud en el proceso electoral. La dirigencia política debe estar clara en la necesidad de organizar y unificar a las fuerzas juveniles revolucionarias del Ecuador, más allá de AP; es necesario -además- recordar que, siendo fuerza vital, requiere estar capacitada para volcarse con eficacia al trabajo político. Es necesario el conocimiento y la convicción para la lucha, no solo la ventaja de ser joven; y es tarea de todos.
Las próximas elecciones, la décima consecutiva, las ganará nuevamente la RC. En la campaña hay que incorporar con fuerza el apoyo a la revolución agraria, que más allá de la redistribución de tierras, acceso a la propiedad, aumento de la producción agrícola y mejoramiento de la productividad, elevará el nivel de vida rural; con ella se reducirán los flujos migratorios y las ciudades se verán menos presionadas; por tanto, los municipios pueden operar mejor, entregando servicios y, a tono con la revolución urbana, atenderán a la población con mejor infraestructura y ambiente adecuado, y uso racional de su territorio para el Buen Vivir.