Su intención es alcanzar la reelección en enero
Chiriboga se quitó presión con la salida de Rueda
La gestión de Luis Chiriboga Acosta al mando de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) se llena cada vez más de cuestionamientos tras 16 años en el poder. Pese a eso, su intención es clara: pretende presidir el directorio de la matriz del balompié nacional en un quinto período.
La continuidad del adiestrador caleño Reinaldo Rueda no hubiese caído bien entre los dirigentes del balompié nacional, los medios de comunicación y los aficionados, quienes en su mayoría le quitaron el respaldo al entrenador y empezaron a exigir objetivos más ambiciosos.
Por eso Chiriboga prefirió dejar en manos del próximo directorio la elección del próximo estratega de la Selección Ecuatoriana de fútbol.
Pese a que durante su administración la selección ecuatoriana se clasificó a 3 de los 4 mundiales absolutos que se disputaron en ese lapso, accedió a 2 mundiales sub-20 y se adjudicó la medalla de oro de los Juegos Panamericanos de 2007, su mandato ha estado lleno de constantes cuestionamientos e innumerables polémicas.
Pocos han olvidado los casos de futbolistas con documentos adulterados, el tráfico ilegal de personas e intromisión de partidos políticos, con atentados de por medio, a los entrenadores colombianos Hernán Darío Gómez y Hugo Gallego en 2001.
Ahora, envuelto en un paro de futbolistas impagos, quienes desde el año pasado reclaman a la FEF que los clubes justifiquen sus presupuestos o que se les impida jugar hasta que los haberes sean debidamente cancelados, Chiriboga muestra interés por seguir en el seno de la Ecuafútbol e incluso ha retado a Esteban Paz, uno de sus opositores, a terciar en las elecciones programadas para enero próximo.
Para el catedrático y jurisconsulto deportivo Giovanni Cárdenas, existen varios problemas de fondo dentro de la estructura del fútbol ecuatoriano, que incluso le dan un tinte de ilegalidad a la conformación de la FEF frente a la estructura del deporte ecuatoriano.
Según la Ley del Deporte, vigente desde 2010, las federaciones ecuatorianas por deporte están conformadas por clubes y son los representantes de los clubes los que eligen al directorio. Solo en la FEF existen asociaciones provinciales. Y tienen derecho a votar.
“La estructura del deporte en este país es diferente a la que maneja la Ecuatoriana de Fútbol, porque las federaciones ecuatorianas por deporte, según la Ley del Deporte, incluida la FEF, están constituidas por clubes de alto rendimiento y clubes formativos. En ninguna parte de la ley aparece la figura de las asociaciones provinciales de fútbol profesional”, detalló.
Cárdenas cuestionó a la vez el funcionamiento de las asociaciones provinciales de fútbol profesional, muchas de las cuales no tienen clubes en la primera A ni en la primera B, pero se benefician de recursos entregados por la FEF.
Sobre este tema, Fernando Carrión, investigador social y editor de la Biblioteca del Fútbol de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), declaró para un canal local que las asociaciones constan en una suerte de sistema ‘clientelar’ de la FEF, así como varios clubes, cuyos representantes sufragan en favor de los directivos de la Ecuafútbol a cambio de ‘favores’. Un ejemplo claro es la repartición de los fondos que se consiguen por la venta de los derechos de televisión de los partidos de los torneos de la primera A y primera B, de los que incluso las asociaciones tienen participación.
En este sentido, Cárdenas no muestra desacuerdo en la venta de los derechos de televisión por parte de la Ecuafútbol, pues es la dueña de los campeonatos, pero entiende el malestar de algunos clubes de la primera A que no están contentos con el reparto.
Respecto a si este sistema clientelar de los clubes podría sustentar una nueva reelección de Chiriboga, Carrión opinó que resultaría complicado, sobre todo por la aparición de un protagonista no programado, pero que resulta la parte más visible del ‘rey de los deportes’: el futbolista, quien afronta problemas económicos ante la insolvencia financiera de los clubes.
A criterio de Cárdenas, la situación de los jugadores podría ser determinante, ya que es notoria la vulneración de sus derechos y la poca acción de las autoridades competentes, entre ellas Chiriboga. Tuvieron que pasar casi 2 años, con un paro como medida de presión, para que la Asamblea Nacional intervenga y pida cuentas a los entes responsables de hacer cumplir los derechos. “El Ministerio de Relaciones Laborales (MRL) pudo actuar de oficio y no esperar a que el tribunal de arbitraje de la FEF resuelva los conflictos por falta de pago a futbolistas y entrenadores. El artículo 22 de la Ley del Futbolista dice claramente que una vez que el jugador no cobre por 2 meses seguidos o más, puede pedir a este tribunal que medie para hacer cumplir sus derechos. Cuando dice ‘puede’ no dice ‘debe’, es decir, es facultativo del jugador acudir a esta instancia o ir directamente a la autoridad laboral, como cualquier otro trabajador”, explicó Cárdenas.
El experto añadió que existe una mala aplicación de este artículo porque, jerárquicamente, el Mandato Constituyente 8 y el Código de Trabajo tienen mayor peso que la Ley del Futbolista.Además, los derechos son irrenunciables y las autoridades deben actuar en favor de los derechos de los trabajadores.
Es ilegal que la FEF acepte que los clubes presenten los roles de pago con 60 días de retraso, es decir, el mismo tiempo que la Ley del Futbolista da como plazo máximo para hacer un reclamo por haberes no cumplidos.
Una reflexión alusiva a este tema es la del asambleísta Fausto Cayambe, miembro de la Comisión de los Derechos de los Trabajadores, quien duda de la capacidad reguladora de la FEF en el pago puntual a los jugadores, de lo contrario, estos inconvenientes no se habrían presentado. Esta comisión dio un plazo de 15 días al MRL para hacer las inspecciones respectivas y se informe de los pagos y tipos de contrato que tienen los futbolistas.
Por su parte, la Contraloría General del Estado informó que el 8 de este mes inició un examen especial a la gestión administrativa y financiera de la FEF, por el período comprendido entre el 1 de enero de 2008 y el 30 de junio de 2014.
Sus frases polémicas
“El día que yo tenga conflicto de intereses, que deje de ser imparcial, ese día me iría del fútbol ecuatoriano”.
“La crucifixión era poco para mí (luego de la Copa América 2011), decían que el presidente debía irse porque no servía para nada”.
“Liga no está obligada a pertenecer a la FEF. Si está en la FEF, debe respetar las decisiones de la federación”.
“Nosotros somos los dueños de los derechos de transmisión del campeonato y veremos lo que haremos con ellos”.
“Les quiero decir a ciertos periodistas, muy sueltos de lengua, que la FEF no es responsable de la crisis”.
“La ordenanza (para reducir la capacidad del Atahualpa) va en contra del bolsillo de la FEF. Respetaremos, pero es absurdo”.
“No me molesta en lo absoluto que haya una auditoría de los dineros que recibe la FEF del Estado; es una parte pequeña”.
“Pongamos que Barcelona gana la primera etapa y Dios no quiera repite esa ubicación en la segunda... Es un ejemplo, no tengo nada contra Barcelona”.
“Esta decisión es totalmente injustificada e inaceptable (paro de árbitros), pero lo es más que Intriago corte el diálogo”.
“Esta dirigencia ha puesto la vara muy alta y por eso ahora se piensa que todo es un fracaso (luego del Mundial 2014)”.
Luis Chiriboga Acosta, presidente de la FEF.