“Si no hablamos de las fallas, difícilmente podremos encontrarles soluciones”, dijo Mauricio García, director técnico de Espuce, sobre la participación de Ecuador en el Mundial de Fútbol Femenino Canadá 2015, del que la selección del país fue apeada en primera fase.

Tres derrotas en 3 cotejos, 17 tantos en contra y 1 a favor son los números de la ‘Tri’ en su primera participación mundialista. García, quien llevó a Espuce a clasificar a la Copa Libertadores Femenina de este año, dijo no sorprenderse por los resultados, ya que los equipos a los que Ecuador enfrentó cuentan con jugadoras que militan en clubes del exterior y a nivel local trabajan en mejores condiciones, incluso a  nivel profesional.

Lo que le extrañó al adiestrador manabita son las declaraciones de la timonel de la ‘Tri’, Vanessa Aráuz, cuando mencionó que el juego de Camerún era igual al de Trinidad y Tobago -al que Ecuador eliminó en el repechaje clasificatorio al Mundial- y que con Suiza era posible cosechar un empate.

Según García, no se analizó bien a los adversarios del grupo C, porque Camerún, a su criterio, es de lejos superior al combinado trinitario y varias de sus exponentes se desempeñan en equipos europeos. Suiza, en tanto, propone el estilo del Viejo Continente: fuerza, velocidad, verticalidad y disciplina táctica.

Aunque -añadió- la primera gran diferencia fue el evidente mejor estado físico de camerunesas, suizas y japonesas, que corrieron más y exhibieron mayor fortaleza. Considera que, para optimizar el rendimiento de las compatriotas, debieron pactarse partidos amistosos con rivales de gran nivel. No se refiere a oponentes de potencias mundiales del balompié femenino -que habría sido lo ideal-, sino enfrentarse a un elenco compuesto por las mejores jugadoras de la justa local, reforzado por 4 o 5 varones titulares en los clubes de la primera A masculina.

Cree que es necesario impulsar un proceso a largo plazo (8 años) con divisiones formativas, algo que no se ha hecho aún en el país. Pero, como los clubes no tienen presupuesto para ello, propone que las federaciones deportivas provinciales, el Ministerio del Deporte y la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) inviertan en campeonatos anuales de las divisiones sub-14, sub-16 y sub-18, en el que intervengan selecciones de todas las provincias y que a los juegos nacionales clasifiquen los representativos más destacados.

Jeny Herrera, instructora de Liga de Quito Femenina, destacó que, independientemente del 6-0 ante Camerún, 10-1 frente a Suiza y 1-0 con Japón, el clasificar al Mundial es un mérito muy grande. “Esta clase de competencias son las que, al dar fogueo a las futbolistas, posibilitan su crecimiento”, señaló.

Claro que es impactante perder en forma tan abultada, no obstante,  a selecciones como las de México, Argentina, Colombia, Brasil no les fue fácil ganar por primera vez o acceder a segunda ronda.

Brasil, por ejemplo, quedó eliminado en primera fase en los 2 primeros mundiales que se organizaron (1991 y 1995), pero en el cuarto (1999) avanzó hasta las semifinales. Argentina, en sus 2 primeras participaciones (2003 y 2007) la pasó mal. En el primero terminó último en su grupo, con cero puntos, 15 tantos en contra y 1 a favor. En el otro finalizó último, sin puntos, con 18 dianas en contra y una a favor. Es decir, en los países de la región, el andar es muy difícil.

La entrenadora Wendy Villón, quien manejó en Rocafuerte a 14 de las 23 mundialistas, opinó que las elegidas por Aráuz son las adecuadas, sin embargo, los resultados reflejan la realidad del balompié doméstico femenil, cuya liga nacional recién atraviesa por su tercera temporada y no cuenta con el apoyo de la empresa privada, del público ni de los dirigentes de la FEF, pues la inversión en las bregas proviene del Ministerio del Deporte.

Además, hay una enorme diferencia en la cantidad de partidos que tienen al año las cultoras camerunesas, suizas y japonesas, versus la lid local, que no dura ni 6 meses. Pese a ello, en 2014, jugados apenas 2 campeonatos nacionales, las mujeres clasificaron a un mundial; no tardaron 40 años como los varones.

Al centrarse en las debilidades, indicó que si ella estuviera a cargo, reforzaría la velocidad, potencia y fuerza de las chicas. Como fortaleza, felicita por la actitud de las ecuatorianas, quienes, pese a las goleadas, no renunciaron al juego ofensivo.

Del 15 al 25 de julio, Ecuador contará con la oportunidad para su revancha en el torneo de los Juegos Panamericanos. Así que no hay tiempo para lamentaciones. (I)