UTE no supo manejar la ansiedad
El elenco de la Universidad Tecnológica Equinoccial cometió graves errores en los encuentros considerados claves, de ahí que sus posibilidades de acceder a la disputa del título se esfumaron en el cotejo frente a la Estancia de Colombia.
La dimisión del técnico argentino Carlos Gorosito en el último cotejo de semifinales fue un síntoma de que las cosas no estaban funcionando de la mejor manera.
Las circunstancias motivaron que la manabita Gabriela Mendoza y el argentino Juan Joe Pidal asumieran la responsabilidad en los dos últimos partidos.
“El balance es muy bueno, estar entre los tres mejores países de Sudamérica motiva mucho al grupo, pero el objetivo era ganar el título”, dijo Gabriela Mendoza.
Sin embargo, dejó entrever que hay mucho que mejorar, sobre todo controlar la ansiedad porque aquella circunstancia perjudicó al equipo equinoccial. “No supimos manejar los tiempos, los cambios en la defensa y eso hay que trabajarlo en los entrenamientos”.
Cambiar la mentalidad del equipo con relación a la filosofía del técnico Gorosito fue la primera tarea emprendida por el nuevo y provisional cuerpo técnico.
Adicionalmente se trató de corregir sobre la marcha deficiencias de orden grupal, particularmente en lo que implica la aplicación del sistema defensivo, al tiempo de retomar la fe y confianza de las jugadoras.