Los primeros pasos en la comprensión de la vida y de la herencia estuvieron pegados a las ciencias fuertes de inicios del siglo XIX, la química y las proteínas. Se pensaba que las proteínas eran responsables de la herencia, pero en 1928 Griffith demostró que estaba determinada por los ácidos nucleicos. En 1953 se describiría la estructura molecular de la cadena de la herencia, el ácido desoxirribonucleico, el ADN.
La revista Nature divulgó el 25 de abril de ese año el artículo "Estructura del ácido desoxiribonucleico", de los autores Francis Crick, James Watson y Maurice Wilkins (http://www.nature.com/nature/dna50/watsoncrick.pdf). Por la descripción funcional y química del ADN, los autores obtuvieron el Nobel de Fisiología y Medicina en 1962. Aún hay voces que con justicia reclaman el reconocimiento a la inglesa Rosalind Franklin, quien trabajó en el laboratorio de Wilkins y sería la mentora de los postulados.
El ADN revolucionó la biomedicina. Inició el entendimiento de las enfermedades genéticas, hoy unas 10 mil, y de todo cuanto tiene base en los genes. Inauguró la carrera por descubrir genes y, lo trágico, la avalancha de patentamientos. La genética encontró la base material para explicar las leyes de la herencia que postuló G. Mendel en 1865. El gen es la unidad de la herencia y es uno de los 23 mil segmentos que conforman la cadena del ADN, que si la sacamos de una célula llega a medir 1,74m.
El ADN explicó el origen de la vida y la evolución de las especies. Todos los seres vivos compartimos el mismo ADN, lo que nos une biológica y evolutivamente. La organización progresivamente compleja de su molécula, nos proporciona las individualidades como especies. El ADN es la esencia de la estructura orgánica tridimensional y probablemente de lo que somos y de parte de nuestro comportamiento.
Hay quienes, alejados de la ética, han mal usado los conocimientos del ADN y han producido armas biológicas, organismos genéticamente modificados peligrosos o tratan de discriminar al ser humano por su esencia genética.
La medicina moderna se basa y progresará en función de lo que descubramos del ADN, de los genes y de su comportamiento. Ya existen pruebas para descifrar el ADN completo de los organismos, lo que se llama el genoma, y en éste encontraremos la solución a cientos de enfermedades, produciremos nuevas y mejores vacunas, mejores tratamientos personalizados, lograremos manipular más eficientemente los genes y usar la sabiduría humana para el bienestar, la paz, la equidad y la justicia.