La emoción de Fabricio Reyes fue desbordante cuando escuchó que el proyecto HandEyes resultó ganador de la tercera edición del concurso ‘Una idea para cambiar la historia’, organizado por la cadena internacional History Channel. Él observó desde Ecuador, en su ordenador, el desarrollo de la ceremonia de premiación efectuada en México, la noche del miércoles. Estuvo con Álex Aldaz en Sangolquí (Valle de los Chillos). ¡Felicidades chicos, felicidades #Ecuador! | Proyecto .@HandEyes1 ganó concurso internacional de History Channel ► https://t.co/fNg7OcrMYt pic.twitter.com/nQF8M4letQ — El Telégrafo Ecuador (@el_telegrafo) 8 de diciembre de 2016 En cambio, Diego Aguinsaca y Carlos Canuacán estaban en el set del país norteamericano. Ellos retransmitieron el evento por redes sociales. “Demostramos que en el país hay capacidad para hacer innovaciones”, expresó Reyes. Los cuatro ecuatorianos, como parte del premio, trabajarán durante un año con History Channel. Ellos crearán prototipos de la innovación y la distribuirán en América Latina. Inicialmente tenían previsto elaborar 200 dispositivos para comercializarlos en el país desde enero. Las ventas serán online. El precio aún no está determinado, pero podría ascender a $ 100. La ayuda técnica solo tendrá un botón para escoger entre vibración, sonido o tener ambas opciones. No será mayor a 3x4 centímetros. “El próximo año tendremos un trabajo intenso y un mayor compromiso, pero estamos seguros de que lo podemos enfrentar. Tenemos una planificación, pero dependerá de lo que los organizadores propongan”, comentó Aldaz. El proyecto nació en Sangolquí En las aulas de la Universidad de las Fuerzas Armadas (ESPE), de Sangolquí, nació la primera idea de HandEyes. Ocurrió en la cátedra de emprendimientos, que se imparte en todas las carreras de la institución, durante dos semestres. Maribel Maya, coordinadora de emprendimientos de la ESPE, explicó que desde 2005 dictan la cátedra. En el desarrollo de proyectos académicos -contó- surgió el dispositivo HandEyes. “Tuvo perfeccionamientos hasta llegar a la versión actual (ganadora)”. Ella fue la profesora de Aguinsaca cuando el proyecto recién apareció y participó en la primera feria de resultados de la cátedra de emprendimientos. El prototipo, desde ese tiempo, comenzó a exponerse en ferias y concursos tanto locales como internacionales. “Diego (Aguinsaca) siempre fue visionario y distinto al resto de sus compañeros. Armó muy bien el equipo, con técnicos y profesionales, para desarrollar este producto. Nos sorprende gratamente, sobre todo porque está pensado en la necesidad de personas con discapacidad visual”. La novedosa ayuda técnica tiene componentes electrónicos y mecánicos que funcionan con programación especializada. Al inicio el dispositivo tenía la forma de un guante que cubría casi todo el brazo, pero los mentores se dieron cuenta de que era demasiado pesado para que cumpliera su objetivo. Poco a poco lo modificaron. {unitegallery 11_11_16_handeye} Sus primeros usuarios fueron las personas con discapacidad visual que trabajan en la biblioteca de la universidad. “Ahí conocimos de cerca las limitaciones que tenía el invento. Nos sirvió para adaptarlo de mejor forma al objetivo de ayudar a este tipo de personas”. La innovación, con el asesoramiento universitario constante, se transformó y fue presentada al Banco de Ideas de la Secretaría de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (Senescyt). Allí obtuvo el primer lugar y un capital semilla de $ 50.000. Fueron los primeros vencedores del programa de emprendimientos. El triunfo en el Banco de Ideas les permitió escoger la incubadora que apoyaría su invención en julio de 2015. Los creativos seleccionaron Prendho (Loja), porque dos de ellos son oriundos de esa ciudad. En ese contexto conocieron a Iván Serrano, gestor de emprendimientos, quien se convirtió en asesor del proyecto. “Desde el principio tuvimos empatía con los cuatro chicos. Ellos son muy comprometidos y siempre están dispuestos a trabajar para sacar sus ideas adelante”. Parte del trabajo de Serrano consistió en seleccionar a los mejores proveedores del país para aprovechar el capital que ganaron y traducir la idea en el producto. En agosto de este año, él le comentó a Diego sobre el concurso de History Channel cuando faltaban pocos días para que cerraran las inscripciones. Cumplieron con los requisitos y se registraron entre 5.000 proyectos de América Latina. “Una de las exigencias es que la idea sea replicada en cualquier parte del mundo y con HandEyes se puede conseguir”. Nuevos planes El período de acompañamiento oficial concluyó, pero la relación se mantiene y existe la opción de que la empresa SAIS 3D -propiedad de los cuatro chicos- tenga una representación en el centro de emprendimientos de la Universidad Técnica Particular de Loja (UTPL) para impulsar más la empresa. El presidente de la República, Rafael Correa, a través de Twitter, felicitó a los compatriotas. “Nuestros jóvenes son brillantes”. Lo mismo hizo el secretario de la Senescyt, René Ramírez, quien expresó: “HandEyes demuestra hasta dónde podemos llegar los ecuatorianos. Una revolución silenciosa que se incuba en el Banco de Ideas para cambiar la historia”. (I)