Un puntaje de 46.90 sobre 100 ubicó a Ecuador en el puesto 48, con el nivel más bajo de inglés entre 60 países del mundo, según una evaluación realizada por Education First (EF). Esta es una compañía internacional especializada en la enseñanza de idiomas. La tercera edición del estudio EF EPI (English Proficiency Index o Índice del Nivel de Inglés) estuvo dirigida a más de 750.000 personas mayores de 18 años, incluyendo a estudiantes y empleados. La jefa de oficina de EF en Guayaquil, Haydeé Villacrés, señala que los postulantes ingresaron a una dirección web en donde rindieron el examen, que comprendía valoraciones en gramática y audio, de acuerdo con la normativa del Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas. En Ecuador fueron cerca de 52.000 evaluados, quienes ubicaron al país en una posición detrás de Colombia, Chile, México o Perú durante 2013. Esto fue un retroceso en cuanto a la evaluación de 2012, que ubicó al país en el lugar 46. “El indicador nos dice que la población está creciendo, pero que cada vez hay menos personas que están invirtiendo en mejorar su nivel de inglés”, advierte Villacrés. Para la representante de EF, el desinterés de la población, especialmente en los jóvenes, se refleja en los pasatiempos que prefieren en la actualidad, como jugar con los teléfonos inteligentes. “Si hubiesen campañas en donde se enfatice que para tener un mejor trabajo o hacer una carrera profesional se requiere estudiar inglés, los jóvenes buscarían alternativas de preparación”, expresa Villacrés. El estudio EF EPI sostiene que los trabajadores con un buen nivel de inglés ganan entre un 30% y 50% más que los profesionales que no conocen el idioma. Los resultados obtenidos por la academia privada no varían mucho de la prueba realizada por el Ministerio de Educación (Mineduc). En 2009, la cartera de Estado sometió a un examen de inglés a alumnos de décimo de básico y tercero de bachillerato, cuya calificación promedio fue de 13 sobre 20. Jaime Mora, quien ha sido profesor de inglés durante 15 años, manifiesta que lo más importante de aprender la lengua es valorar la cultura. “El maestro debe ser un motivador del idioma y debe crear un ambiente de confianza en el que el estudiante no solo vaya a aprender a hablar otra lengua sino a conocer el modo de vida” de los lugares donde se habla dicho idioma, expresa. De acuerdo con Mora, el ambiente óptimo para aprender ocurre cuando los menores viajan a estudiar a otros países. “Las calles están en inglés y eso coadyuva a que la parte cognitiva se desarrolle de manera más rápida, por eso es fundamental que durante las horas en que el estudiante aprende inglés, no se hable español”. Otro de los factores que menciona Mora, es la experiencia de los docentes en otros países para que puedan transmitir las experiencias a sus educandos. En la evaluación del Mineduc, el 39% de los docentes estaba en un nivel básico. Desde 2012, la Secretaría de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (Senescyt) en convenio con el Ministerio del ramo, ha entregado 1.128 becas a docentes de inglés para que se preparen en universidades de Kentucky, Kansas, Nuevo México y Valparaíso (Indiana), en Estados Unidos. A través del programa ‘Enseña Inglés’, los profesores pueden perfeccionar el idioma y aprender nuevas metodologías de enseñanza y pedagogía, bajo la modalidad presencial durante un lapso de siete meses para las capacitaciones y un año en el caso de maestrías. Verónica Morales, jefe de la División de Idiomas Extranjeros de la Subsecretaría de Educación de Guayaquil, indica que con el proceso se espera que hasta 2017 los alumnos del sistema fiscal terminen sus estudios de inglés con el nivel B1 o intermedio.