Mauricio Rodas, alcalde de Quito, en entrevista con Ecuavisa, defendió ayer el proceso de contratación de la Fase II del Metro, en cuya construcción participa la empresa Odebrecht en consorcio con la española Acciona. Señaló que la denuncia del Departamento de Justicia de los EE.UU., sobre el pago de sobornos por parte de la firma brasileña a cambio de contratos, “no hace ninguna mención ni al Municipio de Quito ni al contrato de la Fase II”. Dijo además que “el contrato para la segunda fase del Metro ha sido, probablemente, el más vigilado en la historia del Ecuador. Ha contado con el control y las regulaciones permanentes de cuatro organismos multilaterales”, que financian la obra. Se refirió, también, al informe de Contraloría sobre la fase de estudios del proyecto de transporte y la diferencia entre el presupuesto referencial establecido por la anterior Alcaldía y el valor contratado por su administración. Citó el documento oficial al señalar “que la Contraloría (lo) ha calificado en un examen especial como un presupuesto referencial subvalorado. Es decir, que no reflejaba la realidad del mercado. Tanto es así que ninguna de las 4 ofertas finalistas se ajustaron a dicho valor referencial”. El exalcalde Augusto Barrera se abstuvo de comentar al respecto. Dijo que necesita conocer el documento antes hablar. En otro tema relacionado con el Metro, el 28 de enero del año pasado, la empresa municipal Metro de Quito presentó al Concejo Metropolitano el proyecto de ordenanza sobre la concesión del sistema de recaudo del medio subterráneo de transporte que se construye en la ciudad. El traspaso del manejo de la recaudación por la obra del Metro a manos privadas es una de las estrategias de la Alcaldía para reducir el costo de la construcción de la Fase II del proyecto. La otra es la desvinculación de la infraestructura eléctrica del sistema de movilidad del contrato. El precio y la implementación de estos elementos estará a cargo de la Empresa Eléctrica Quito (EEQ), en condiciones que el Cabildo no ha revelado todavía. De acuerdo con un plan elaborado por Metro de Quito sobre el sistema de cobro de pasajes, conocido como Sistema Inteligente de Transporte (SIT), la forma como se lo establecerá está atada a su implementación en el resto de la transportación pública capitalina. Esto según las exigencias del Banco de Desarrollo de América Latina (ex Corporación Andina de Fomento), uno de los 4 multilaterales que apoyan la realización del Metro con créditos. De acuerdo con el plan, el SIT se instalará en primer término en los elementos de movilidad que tienen relación con la Municipalidad (trolebús, corredores centralizados y alimentadores); el siguiente turno será para el transporte convencional; luego se aplicaría en el sistema Quitocables, hasta llegar a la infraestructura y unidades del Metro. De acuerdo con un informe de la empresa municipal del Metro, el sistema debería estar implementado en el transporte municipal hasta el 30 de junio de 2017 y hasta el 30 de junio del próximo año en, al menos, el 70% de la flota convencional de movilidad. Para el Metro, el plazo correría hasta la terminación de la obra, calculada para finales de 2019. Hasta ayer, sin embargo, ni la Empresa Metro de Quito ni la empresa municipal de transporte de pasajeros habían convocado a la licitación para implementar el sistema de recaudo en los corredores dependientes del Cabildo. La información no aparecía en el portal web del Sistema Nacional de Contratación Pública (Sercop). El sistema estará integrado básicamente por tres elementos estructurales: Sistema Integrado de Recaudación (SIR), Sistema de Ayuda a la Explotación (SAE) y Sistema de Información al Usuario (SIU). (I)