Fue amenazada de muerte por apoyar al presidente Lenín Moreno y a la consulta popular que eliminaría la reelección indefinida. No cabe el fanatismo -dice- y exige depurar a Alianza PAIS (AP) para sacar a los que mal usaron sus representaciones. Elizabeth Cabezas, legisladora y directora del Distrito Pichincha de AP, habló con este Diario sobre la expulsión de Moreno de su movimiento, el juicio de Jorge Glas (que el bloque legislativo de AP analizará mañana a puerta cerrada), la consulta, y otros temas. ¿Qué persiguen Gabriela Rivadeneira y Ricardo Patiño con la destitución de Lenín Moreno como presidente de AP? Hay grupos interesados en dividir a AP para luego proclamarse oposición. Es una acción suicida que no mira al futuro. Pero la mayoría del movimiento apoya al presidente Moreno. No puede ser que él no tenga el respaldo de su propio bloque, eso es inaceptable y absurdo.  Además hay que verificar si la reunión de la Dirección Nacional, que lo expulsó, cumplió con toda la legalidad para tomar esa decisión. ¿Usted es partidaria de expulsar a las cabezas del “golpe de Estado” contra el Primer Mandatario? La Comisión de Ética de AP debe depurar el movimiento y deberá  pronunciarse con claridad sobre aquellos militantes y dirigentes que irrespetaron el Reglamento Orgánico y se arrogaron funciones. Yo creo que hay que sacar a quienes hacen uso inadecuado de sus representaciones y a quienes se aprovecharon y traicionaron la confianza de los ecuatorianos. ¿Por qué esos líderes traicionaron al pueblo ecuatoriano? Los ecuatorianos nos dieron un mandato para trabajar por ellos y luchar contra la corrupción. Pero ellos abusaron e hicieron mal uso de fondos públicos y hay muchos casos de corrupción. El ciudadano espera una sanción ejemplar para ellos. Y la revolución ética, que tanto hemos proclamado, tiene que convertirse en una realidad. La “devoción” de ciertos líderes de AP al expresidente Correa se debe a que pasaron de anónimos a figuras públicas, tuvieron salarios altos y cambiaron su estatus social. ¿Usted qué opina? Hay que ser realistas y objetivos. Usted lo ha dicho con claridad. Hay un país y no estamos jugando en un cuarto cerrado. Todo lo que hace AP tiene seria trascendencia política y crea consecuencias. Eso es algo que no podemos soslayar. ¿El manejo de recursos públicos les permitió a esos exfuncionarios repartir beneficios entre ‘panas’? Nunca estará justificado que el poder político beneficie a grupos particulares, minúsculos inclusive. Lo ideal es que el beneficio social se distribuya correctamente; esas concentraciones son reprochables. ¿Por qué razón AP confronta y no legisla para buscar soluciones a los serios problemas del país? El bloque tiene un reto histórico. Debe superar el conflicto interno y acompañar el proceso de cambio en paz, tranquilidad y confianza para activar la economía y atraer más inversiones. ¿Por qué insisten dentro de AP en que existe unidad, cuando sobran las pruebas y ejemplos de que está profundamente fracturado? Una minoría del bloque ha tomado acciones unilaterales parcializadas y ajenas. Representa su accionar pero no los intereses de las bases. En esa línea, ciertamente, existe una mayoría que suscribió hace pocos días un manifiesto político que representa un apoyo claro y directo al presidente Lenín Moreno y a la consulta popular. ¿A cuántos se refiere con mayoría y minoría en su bancada? En concreto, 44 firmas apoyan al Presidente, pero pueden ser más hasta el lunes, pues hay un grupo que no quiere visibilizarse a favor de Moreno o de Correa. Y unos pocos han asumido una posición radical; son 18 correístas. ¿Está de acuerdo con la tesis de que se tramite ya el juicio político contra el vicepresidente Glas? Estoy totalmente abierta a hacer un análisis profundo en función del nuevo escenario sobre ese caso. No olvidemos que los temas que se ventilan en el ámbito de la justicia son pruebas de gran peso. Si AP busca la transparencia, ¿por qué no acelera el paso al proceso de interpelación a Glas y a otros funcionarios y exfuncionarios? Tratamos de mantener una línea de análisis, en la comisión, y allí clarificar esos temas importantes. Personalmente creo que no está cerrada la posibilidad de tener otra posición sobre ello. El país, en efecto, está muy atento a lo que hace la clase política estos días. Se denunció que el exministro de Educación y actual asambleísta, cercano al grupo correísta, hizo poco con las denuncias de abuso sexual a niños en las escuelas. ¿Cuál es su criterio al respecto? Si usted me pregunta a mí, firmo este rato el pedido de juicio político. Él es inconsecuente, ni siquiera dice bien las cosas para tener apoyo de sus compañeros. Él dijo que ustedes activaron el ‘hombre del maletín’ dentro de la Asamblea. ¿Qué responde? Rechazo esa acusación. Es más, le emplazo a que diga quién es el hombre del maletín y a quién le ha llegado eso. Los correístas no aceptan eliminar la reelección indefinida ni el cese de las autoridades del Consejo de Participación. ¿Qué procede? Estoy totalmente de acuerdo con la consulta y trabajamos por el Sí. La reelección nunca fortalecerá la participación ciudadana y menos los nuevos liderazgos que tanto hemos abanderado. Contradecimos los hechos con el discurso. (I)