Una comisión bicameral de Haití abrió ayer la inscripción de candidatos a presidente del gobierno transitorio. Ese fue el acuerdo entre las fuerzas políticas para superar la crisis que vive el país. Según una nota conjunta del Senado y la Cámara de Diputados, el equipo lo integran 15 legisladores y debe terminar su trabajo en 4 días. De esa manera se superará la acefalía tras la salida del presidente Michel Martelly. Su mandato expiró el pasado 7 de febrero sin que se hayan celebrado elecciones. Paralelamente, el primer ministro de Haití y encargado interino del Ejecutivo, Evans Paul, reiteró su invitación a los sectores políticos del país para sentarse en una mesa de diálogo y encontrar una solución a la crisis. Entre otras cuestiones, la comisión establecerá el procedimiento y los criterios para seleccionar al presidente interino. Además analizará la documentación de cada solicitante y se reunirá con los sectores de la vida nacional. Sin embargo, la Asamblea Nacional exhortó a las fuerzas sociales y políticas a colaborar para que el proceso fluya en un ambiente pacífico, termine con éxito y abra el camino al diálogo constructivo en Haití. El Legislativo dará cumplimiento así a un acuerdo de última hora cerrado el viernes pasado con Martelly para evitar el vacío de poder tras el fin de su mandato. Dicho pacto estipula que el gabinete de tránsito se extenderá por 120 días. Ese gobierno organizará la segunda ronda presidencial el 24 de abril y entregará el poder el 14 de mayo, cuando asuma el nuevo jefe de Estado. Pero los principales partidos de oposición rechazan el acuerdo para formar un gobierno provisional que remedie el “vacío de poder” existente y advirtieron que no aceptarán un “golpe parlamentario”. Además, convocaron más protestas para demandar nuevas elecciones. Según la oposición, el pacto “intenta validar las elecciones de la primera vuelta como si fueran normales, sin tener en cuenta las protestas populares que terminaron con varios muertos y la rotura de la sociedad haitiana”. En la primera vuelta de las elecciones presidenciales de Haití, realizada el 25 de octubre pasado, el candidato Jovenel Moise alcanzó el 32,76% de los sufragios, mientras que el postulante opositor, Jude Celestin, obtuvo el 25,29% de los votos. El segundo no participaría en el balotaje por el “fraude masivo” que, a su juicio, ocurrió en la primera ronda. La ley haitiana indica que el candidato que renuncie será sustituido por el tercero más votado. En este caso es Moise Jean Charles que también dimitió. En medio de este proceso, también, renunciaron miembros del Consejo Electoral Provisional. En el terreno trabaja una misión de la Organización de Estados Americanos (OEA) que ha mediado en la crisis política. La segunda vuelta, prevista para inicios de febrero, se suspendió por falta de seguridad en el país. (I)