Fue toda una sorpresa. La noche del domingo y por cadena nacional, la presidenta Michelle Bachelet anunció el presupuesto 2018 y elevó el crecimiento del gasto público al 3,9% para el próximo año. El anuncio fue inesperado porque los analistas estimaban que no superaría el 3%. Pero la mandataria justificó la medida al señalar que la economía chilena ya superó su “momento más complejo”. Las palabras de la Jefa de Estado han generado una ola de reacciones, en medio de la contienda presidencial con miras a las elecciones del próximo 19 de noviembre. “Las proyecciones económicas son alentadoras”, dijo Bachelet. “El 2018 podríamos crecer el doble de lo que crecimos en 2017. En otras palabras, hemos podido superar el momento más complejo”, añadió. La declaración de la Presidenta se sustenta en el anuncio que hizo el lunes el ministro de Hacienda, Nicolás Eyzaguirre, quien señaló que la economía local crecería el 3% en 2018 y 3,25% en 2019. Ello, ante un repunte gradual de la actividad económica, por el mayor gasto público y por las mejores expectativas del comercio a nivel mundial. En el primer semestre del año, la economía chilena tuvo una expansión de apenas el 0,5%, el porcentaje más bajo en ocho años. El Ministerio de Hacienda proyectó en su momento un crecimiento del PIB de 1,5% para 2017. Pero para que eso ocurra, la economía debería crecer por lo menos el 2,4% en la segunda mitad del año, algo que resulta poco probable. De hecho, los analistas económicos coinciden y sitúan el crecimiento para lo que resta del año entre el 1,2% y un máximo de 1,5%. De todos modos, el optimismo ronda en la administración de Bachelet, que sostiene que la economía se verá impulsada el próximo por la demanda interna del 4,1% y el precio del cobre, situado en 2,88 la libra. Estas primeras señales de recuperación económica coinciden con la principal preocupación de los chilenos. Según los estudios de opinión, la economía y en específico la generación de empleo, están en el tope de la tabla en cuanto a las prioridades de la mayoría. De acuerdo con las últimas cifras entregadas por el Banco Central, el desempleo alcanza al 7%, cifra considerada alta en Chile. En cuanto al presupuesto, el último del gobierno de Bachelet que deberá dejar La Moneda en marzo del próximo año, se ha dado prioridad a la inversión en infraestructura, salud y educación, este último punto eje central de las reformas estructurales que ha intentado implementar la Presidenta durante su gestión de cuatro años. El aumento del gasto público supone 70.000 millones de dólares. ¿Un milagro? En un desglose de cómo se distribuirá el presupuesto del próximo año, el diario La Tercera señaló que para educación se destinarán casi 16 mil millones de dólares, un tercio del total. Otra parte importante irá para Salud. Ambos ministerios acumulan el 41% del total, con alrededor de 29.000 millones de dólares. De inmediato, el anuncio de Bachelet generó reacciones en el mundo político, en especial entre los principales candidatos presidenciales. El primero en reaccionar fue el expresidente Sebastián Piñera (centro derecha), actual favorito según las encuestas. “Es poco prudente y muy irresponsable porque la economía chilena está creciendo menos del 2% y el gasto público va a crecer más del doble”, dijo. “Esto de anunciar que va a venir un milagro es algo muy temerario. Esto de prometer en el aire que la economía se va a recuperar me parece muy voluntarioso. Yo creo que sí, se va a recuperar, pero porque vamos a hacer cambios”, agregó Piñera. A su vez, el candidato pro Bachelet, Alejandro Guillier, dijo que el anuncio “fue un poco sorpresivo”, aunque señaló que a su juicio el presupuesto está “bien focalizado”. “La focalización nos parece adecuada porque obviamente hay un compromiso con la gratuidad (en educación) y un compromiso en material de salud”. Además dijo: “Sabemos que la economía está repuntando, en forma bastante significativa”. (I)   DATOS Chile registró una inflación negativa de 0,2% en septiembre en relación a igual mes del año anterior, cifra que causó sorpresa en el ámbito económico local y que se explicó por las bajas en los precios de alimentos y bebidas, informó ayer el Instituto Nacional de Estadística. En tanto, la inflación acumuló el 1,4% en lo que va del año y 1,5% a doce meses, mientras que en agosto registró el 0,2%. El Banco Central recortó su estimación de inflación al 2,4% para este año, contra el 2,9% previo, tras un ligero aumento de la proyección de crecimiento total de la economía, a un rango entre 1,25 y 1,75%, frente a una estimación previa de entre 1,0 y 1,75%. La inflación en Chile cerró 2016 con un alza de 2,7%. (I)