Jóvenes rescatan paredes del sur de Guayaquil

‘La sonrisa de mamá’ o ‘Tengo su nombre donde debería estar mi corazón’ son dos de las tantas frases que Aarón Torres, de 18 años, replica con el nombre de Acción Poética Guayaquil, al sur de la ciudad.

Esta agrupación se remonta a México de 1996, cuando el poeta Alanis Pulido reflejó sus obras, poemas y pensamientos, a través de un mural. Desde ahí miles de jóvenes se han impuesto plasmar sus ideas en distintas localidades. “Se empezó este movimiento debido a mi deleite por la lectura y quería tratar de hacer algo diferente, comunicar mis gustos; no solo enriquecerme con la lectura sino compartirla con los demás”.

Torres comenzó a pintar en abril del año pasado, pero a medida que pasaron los meses más jóvenes se sumaron a esta labor. En total son quince personas las que se reúnen antes de pintar una pared. Por lo general se colocan frases de escritores como Gabriel García Márquez, Mario Benedetti, o de canciones. Lo que se busca es llegar a la conciencia del transeúnte.

Los muros que son elegidos deben poseer parámetros, como que hayan sido grafiteados durante mucho tiempo o que den una mala imagen al barrio. Solo así, existiría una variación, es decir, que cuando se la vea se note el trabajo que se hace. Los murales pueden costar entre $10 y $15.

Se invierte un galón de pintura blanca, un bote de pintura negra, pinceles, brochas y bebidas para quienes conforman la agrupación. De ahí, el tiempo que les toma realizar el trabajo lo promedian en un máximo de 3 horas. Deben esperar que la pintura blanca se seque.

Torres, quien estudia Gestión Empresarial, dice que la ciudadanía se puede dar cuenta de la diferencia que existe entre acción poética y grafitis. “Nuestro trabajo es estético y tiene un mensaje”. (I)

Los integrantes van por lo estético

Una actividad reconocida por la ciudadanía

Las autoridades del colegio Francisco de Orellana les han permitido hacer su arte en las paredes de la institución. Han pintado 4 murales con frases como: “Podrás encontrar el amor”… y a su costado menciona: “A la vuelta de la esquina”. Esta es una de las expresiones que cuenta con mayor aceptación de los estudiantes. “Esperamos que la juventud se dé cuenta de que puede hacer algo diferente, de que puede marcar un cambio y trabajar con creatividad”, aseguró Torres.