Es saludable que la aerolínea comercial de bandera nacional más importante que tiene el Ecuador anuncie acciones que le permitan cubrir su déficit, cobrar las deudas y que entre a competir en un mercado tan dinámico como el de la aviación. Más allá de los millonarios números presentados por la aerolínea en su reciente balance público es muy importante que el manejo administrativo sea impecable, al menos así se evidencia tras los anuncios del delegado presidencial al directorio de Tame, Ignacio Vallejo. Hay que recordar que Ecuador tuvo una gran aerolínea el siglo pasado que se llamaba Ecuatoriana de Aviación, que cubría las rutas más importantes de América, pero que inesperadamente dio un giro que la llevó a la quiebra y que ni siquiera pudo salvarse con la privatización. Es trascendental que se cobren los saldos pendientes con Venezuela y que se recupere toda la flota para que el usuario que viaja en esta compañía recupere la confianza. (O)