Debido al urgente requerimiento para evaluar las infraestructuras afectadas por el sismo del pasado 16 de abril, un grupo de voluntarios especialistas de la Universidad de las Fuerzas Armadas (ESPE), acudió a Manabí para determinar evaluaciones técnicas en las estructuras, viviendas y universidades afectadas. El equipo de expertos y estudiantes de los últimos niveles de la ESPE apoyaron en actividades de mitigación en la zona de la catástrofe y especialmente en los centros de Educación Superior. Capacitaron a 110 profesionales y esde la Universidad Laica Eloy Alfaro de Manabí. Los voluntarios iniciaron sus actividades en Manta, entre éstas, la capacitación que inició con una charla inicial sobre la peligrosidad sísmica. El curso instruyó a los participantes sobre la metodología de trabajo a aplicar, para finalmente dividirlos en grupos de trabajo e intervenir en las instalaciones de la ULEAM y en la parroquia Tarqui, logrando la evaluación de 516 edificaciones. También realizaron la capacitación a un equipo de trabajo de la Universidad Politécnica Nacional (UNP), quienes junto a estudiantes de Ingeniería Geográfica de la ESPE, evaluaron los hospitales de Manta. Adicionalmente se realizaron las mismas actividades en la Universidad Técnica de Manabí y en la Pontificia Universidad Católica de Bahía de Caráquez, en donde se realizó la valoración de dos edificios. El equipo estuvo presidido por el Tcrn. Humberto Parra, Especialista en Geofísica y Director del Departamento de Seguridad de la ESPE; Roberto Aguiar y Pablo Caiza, especialistas en estructuras y 13 estudiantes de los últimos niveles de Ingeniería Civil y 3 alumnos de Ingeniería Geográfica. Una vez culminado el trabajo en campo, junto a Parra generaron una base alfanumérica y realizaron los gráficos de valoración de daños. Actualmente están trabajando en la evaluación de reforzamiento de determinadas estructuras de las universidades y los costos que podría ocasionar. Tanto la ESPE como las entidades coordinadoras plantean apoyar académicamente la propuesta de planes de desarrollo, reubicación y en diferentes temáticas que tienen que ver con las actividades potevento sísmico. “El papel de las universidades es fundamental, porque el punto de vista académico y científico del entendimiento de las causas del evento sísmico y de los daños ocasionados, permitirá posteriormente tomar medidas no solamente en las zonas afectadas, sino en las demás zonas del país que tienen una alta peligrosidad sísmica” aseguró Parra. (I)