¿Cómo se ejecutó la repotenciación de la Refinería de Esmeraldas para que en menos de 2 años esté operando en condiciones inadecuadas?

Esa es la interrogante que quiere resolver Carlos Pérez, ministro de Hidrocarburos, quien tiene serias dudas sobre la calidad de los trabajos realizados en la planta, después de una serie de incidentes como el incendio que sufrió la Unidad de Craqueo Catalítico Fluidizado (FCC) que obligó a la paralización parcial de la planta durante 6 días.

La refinería fue intervenida en 2008, después de que la empresa pública Petroecuador fuera declarada en emergencia en noviembre de 2007, a través del Decreto Ejecutivo N° 766, suscrito por el entonces presidente Rafael Correa.

En el documento consta que por una deficiente orientación de Petroecuador se produce una situación conflictiva en las áreas de exploración y producción; industrialización; y comercialización y transporte de petróleo.

Líneas más adelante se lee que “es necesario intervenir urgentemente en todo el Sistema Petroecuador para salvaguardar los intereses nacionales”.  

La declaratoria de emergencia implicó la movilización de las instituciones, bienes y recursos públicos “que fueren menester para lograr los resultados esperados” para superar inconvenientes en las áreas mencionadas.

Siete años tomó la rehabilitación. Participaron en el proceso destacadas firmas internacionales, como SK E&C (Corea), Eagle Burgman (Alemania), KBC Advanced Technologies (Inglaterra), Worley Parsons (Australia) y Veolia Enviroment (Francia).

En medio de cuestionamientos al proceso operativo y contractual, la planta intervenida fue entregada a la sociedad el 17 de diciembre de 2015.

Estuvieron presentes, entre otras autoridades, el vicepresidente de la República, Jorge Glas; el entonces ministro de Hidrocarburos, Carlos Pareja Yannuzzelli; y Álex Bravo, que en ese momento era gerente de Petroecuador.

Pareja y Bravo ahora cumplen una sentencia de 5 años por cohecho cometido en Petroecuador. Aparte enfrentan otros cargos por delitos de corrupción.

Durante la inauguración, las autoridades de aquel momento manifestaron que la rehabilitación significó una inversión estatal de $ 1.200 millones y que generaría ahorros para el Estado por más de $ 300 millones anuales.

Ahora se conoce que la cifra global asciende a $ 2.200 millones por contratos complementarios. De esa cantidad, entre $ 1.000 a $ 1.200 millones se ocuparon solo para las tareas de repotenciación, mientras que otros $ 1.100 millones se gastaron en mantenimiento preventivo/operativo, dijo Carlos Pérez a EL TELÉGRAFO.

En la inauguración de 2015 Glas dijo que la refinería, en ese instante, operaba al 102% de su capacidad. También señaló que, debido al descuido de las anteriores administraciones, hasta antes de la intervención, la planta rendía en un 80%. Que “estuvo a punto de colapsar”.

Lejos de lo que se vaticinó luego de la repotenciación, el escenario actual no es alentador, por lo que este año se prevén paralizaciones programadas con el fin de solucionar los daños, aseguró Pérez.

Agregó que el sistema de generación eléctrica “está en terribles condiciones”.

Hasta que se logre reemplazar o reparar el generador la refinería se conectará a la Termoesmeraldas. “El Sistema Nacional Interconectado es el que está funcionando ahora, pero necesitamos generadores de respaldo porque por cualquier variación de voltaje o frecuencia la refinería, se cae”, advirtió el actual titular de Hidrocarburos.

Glas no se ha manifestado sobre los cuestionamientos de Pérez.

Mañana, el presidente Lenín Moreno visitará el complejo para verificar el estado de las instalaciones y su funcionamiento.

Este diario contactó a José Icaza, ministro de Hidrocarburos de mayo de 2016 a mayo de 2017, y a José Luis Cortázar, gerente de Petroecuador entre marzo y mayo de este año. A ambos se les consultó en qué condiciones operaba la refinería durante el tiempo de sus gestiones, pero ninguno quiso pronunciarse.

Los dos manifestaron que ese tema debe ser abordado por los técnicos. (I)

CRONOLOGÍA

La Refinería de Esmeraldas fue diseñada y construida entre 1975 y 1977 para procesar 55.600 barriles  de crudo por día. Luego de 20 años se ampliaron sus instalaciones para procesar crudos más pesados, mejorar la calidad de combustibles y minimizar el impacto ambiental

Diseño de la obra (1975)
Diseñan la Refinería Estatal Esmeraldas y 2 años más tarde culmina su construcción con capacidad de procesamiento de 55.000 barriles diarios. En 1987
asciende a 90.000.  

Primer accidente (26/02/1998)
Luego de alcanzar una producción de 90.000 bpd, los tubos del oleoducto y poliductos se rompen y se derraman grandes proporciones de crudo. En el  accidente murieron 28 personas.

Emergencia (2007)
El expresidente Correa emite el decreto 766 para la reparación de los daños. La rehabilitación es asumida por el Fondo de Inversión en Sectores Energéticos e Hidrocarburífero.

Casos de corrupción(10/05/2016)
En 2016 Alex Bravo, ex gerente de Petroecuador es denunciado por trafico de influencias. Posteriormente Fiscalia solicita orden de detención contra Juan, Javier y Jaime Baquerizo.

Nueva autoridad (01/12/2016)
José Luis Cortázar asume la gerencia  de la refinería. Antes fue subgerente de comercialización de Petroecuador y  director de la Agencia de Regulación y Control de Hidrocarburos.      

Daños continúan (11/07/2017)
La refinería paraliza su capacidad de procesamiento aproximadamente a 2 años de su repotenciación, cuyo costo final fue de $ 2.200 millones. Se reportan varios daños.

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Empresas internacionales participaron como contratistas y fiscalizadoras

Ciento sesenta empresas contratistas estuvieron a cargo de la repotenciación de la Refinería de Esmeraldas. El ministro de Hidrocarburos, Carlos Páez, informó que algunos de estos contratos fueron terminados unilateralmente por parte de Petroecuador y otros se encuentran en  etapa de renegociación.

Añadió que la nueva gerencia de refinación continúa con el análisis de los contratos y cómo estos fueron adjudicados. “Si encontramos vicios en esas contrataciones inmediatamente  separaremos a la gente. Es un proceso que no ha terminado. Estamos buscando las pruebas. Yo soy creyente de que alguien es inocente hasta que no se le pruebe lo contrario”.

En lo que se refiere a fiscalización, en una primera fase se hizo internamente con Petroecuador. Posteriormente participaron firmas internacionales, como Worley Parsons International, que según informó Jorge Glas, en octubre de 2016, revisó la ejecución de $ 1.800 millones que incluyeron actividades de mantenimiento,  sostenibilidad y correctivos para el arranque de la refinería.

El Vicepresidente dijo, además, que Universal Oil Product (UOP), con presencia en 19 países, también intervino, así como KBC Advanced Technologies, empresa que ha trabajado en 575 refinerías. “Hemos traído a los mejores”, afirmo Glas en su momento. (I)