El proyecto, ubicado en azuaY, será desarrollado por la empresa Junefield resources
Río Blanco inaugura la minería de oro y plata a mediana escala en Ecuador
Quito y Cuenca.-
Ayer, el Gobierno Nacional inauguró la implementación de la mediana minería con el inicio de la fase de construcción de la mina de Río Blanco, un proyecto que está a cargo de la empresa Junefield Resources Ecuador (Ecuagoldmining) y que está ubicada en Azuay.
En el evento inaugural, el vicepresidente de la República, Jorge Glas; el ministro Coordinador de Sectores Estratégicos, Rafael Poveda; y el ministro de Minería, Javier Córdova, proporcionaron detalles y características del proyecto.
El yacimiento tendrá una vida útil de 11 años
La explotación del proyecto Río Blanco se efectuará a través de una mina subterránea. Según los estudios efectuados hasta el momento, se estima que el yacimiento permitirá una recuperación anual de 67.910 onzas troy de oro y 478.456 onzas troy de plata, es decir, una producción de 2,1 toneladas de oro y 14,9 toneladas de plata. En total, durante 11 años de trabajos se extraerán 23.1 toneladas de oro y 163.9 toneladas de plata.
La vida útil del yacimiento está calculada en 11 años y durante ese lapso contará con una inversión de $ 88,8 millones. Según datos del Ministerio de Minería, la construcción de la mina generará 400 fuentes de empleo directo y 1.100 indirectos. Actualmente, en el proyecto ya laboran 150 personas.
Durante la vida útil de la mina, el Estado ecuatoriano obtendrá beneficios por $ 191,49 millones, un monto que agrega $ 24,59 millones por regalías, $ 67,64 millones por utilidades laborales, $ 84,32 millones por pago del Impuesto a la Renta y $ 14,95 millones por pago del impuesto a la salida de divisas.
La política minera enfatiza la explotación responsable
En este proyecto de minería no se aplicarán elementos contaminantes, “se descarta el uso de cianuro. De esta manera estamos garantizando la salud de los habitantes de Cuenca”, dijo el vicepresidente Glas.
Si bien la construcción de la mina comenzó ayer, se prolongará, por lo menos, hasta junio de 2017. Los habitantes de Chaucha y Molleturo, las parroquias más directamente relacionadas con el proyecto, estuvieron presentes en el inicio de estos trabajos.
La mayoría de ellos se dedica a la agricultura y ahora considera que este proyecto es un respiro para su economía, ya que abrirá mayores oportunidades en el futuro. Por el momento, acotó el vicepresidente Glas, las nuevas opciones laborales favorecerán principalmente a los habitantes de Chaucha y Molleturo, las más cercanas a la mina.
Ángel Guaylla, dirigente de la población de San Pedro de Yumate, indicó que ellos serán los primeros en defender el proyecto minero porque por décadas han estado abandonados. Guaylla explicó que incluso los habitantes de todos estos sectores ya son beneficiados con algunas regalías, entre ellas la construcción de un sistema agua potable para 115 familias por un monto de $ 300.000. “Dispondremos de agua potable, lo que no hemos tenido nunca”, dijo.
Luis Peñaloza, miembro de los pequeños productores de Cochapamba, dijo que ellos también ya son beneficiados por el proyecto, porque hace algunas semanas entregan hortalizas, mermeladas y otros productos a la empresa constructora.
Wilson Medina, un poblador de la zona que se encuentra sin trabajo, expresó su optimismo. “Había pensado salir del país. Pero ahora tengo la esperanza de poder trabajar aquí y estar junto a mi familia”.
“Este proyecto está en fase de explotación y construcción de la mina. Se cuenta con un riguroso plan de relacionamiento comunitario con las poblaciones de Chochapamba, Río Blanco, San Pedro de Yumate y Molleturo”, dijo el ministro Poveda.
Destacó que el país cuenta con una estrategia de fortalecimiento de la industria minera que contempla el estricto cumplimiento de las normas ambientales y el trabajo en armonía con la comunidad.
En ese sentido, por ejemplo, se han efectuado más de 400 monitoreos de los recursos hídricos, constatándose así que no hay afectación alguna ni evidencias de aguas subterráneas en la zona de influencia del proyecto, mencionó también el funcionario. (I)
DATOS
La exploración inicial de los recursos mineros del proyecto Río Blanco inició en 2000 y duró cuatro años. Una vez concluida aquella se dio paso a la fase de exploración avanzada.
En 2008 comenzó la evaluación económica del yacimiento del proyecto. Este proceso tomó más de 4 años incluyendo un lapso de prórroga.
En el último año se afinó la ingeniería a detalle del proyecto minero. Aquella abarcó la construcción infraestructural, el destape de la mina, la adecuación de la escombrera y la construcción de la planta.
$ 10’292.815 fue la inversión requerida para la fase de exploración efectuada en Río Blanco, un proyecto de mediana escala que se desarrollará a más de 3.880 metros sobre el nivel del mar.
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Fuentes de agua no se contaminarán
"Siempre creímos que Río Blanco debía ser el primero"
El ministro de Minería, Javier Córdova (foto), se mostró entusiasta con el inicio de la fase de construcción del proyecto Río Blanco. “Desde el año 2007 siempre creímos que Río Blanco debía ser el primero que inicie”, resaltó.
Para garantizar una producción minera absolutamente responsable, dijo, el proyecto cuenta con todos los permisos ambientales necesarios. “Mucho se habla del agua. Dicen que este Gobierno no se preocupa del agua, cuando antes de este Gobierno ni siquiera existía una autoridad única de agua”, acotó el funcionario.
Por otra parte, en una entrevista concedida a EL TELÉGRAFO en mayo pasado, el Ministro de Minería anticipó que el Gobierno Nacional tenía como expectativa que la producción comience a corto plazo en los cinco proyectos mineros considerados como estratégicos, a saber, Mirador (cobre), Fruta del Norte (oro), Loma Larga (oro), Río Blanco (oro y plata) y San Carlos Panantza (cobre).
“Cuando tengamos estos cinco proyectos, Ecuador será una potencia minera”, dijo el Presidente de la República. (I)
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En varias obras comunitarias
$ 30,5 millones se invirtieron en 12 cantones
A través de la empresa pública Ecuador Estratégico, el Gobierno Nacional diseñó e implementó 107 proyectos de desarrollo social en Azuay relacionados con la dotación de salud, educación, saneamiento, telecomunicaciones, electrificación y, también, con la formulación de los estudios previos para las comunidades del Milenio.
Entre las inversiones efectuadas se encuentran $ 30,5 millones en obras ejecutadas en 12 cantones que tienen directa relación con los proyectos mineros de Loma Larga y Río Blanco.
Victoria del Portete, una parroquia creada hace más de 70 años, es cuna de una de las obras más imponentes en el sector educativo de la provincia.
Se trata de la Unidad Educativa del Milenio que lleva el nombre del lugar donde se asienta, que tiene un área de construcción de 5.900 m2 y que cuenta con espacios que benefician de manera directa a 1.140 estudiantes por jornada.
Esta obra, que fue inaugurada por el Presidente de la República en octubre de 2015, implicó una inversión de $ 6,1 millones, un monto sin precedentes en el sector y que permitió garantizar el acceso igualitario de niñas, niños y jóvenes a una educación de calidad.
A 90 minutos de la localidad se encuentra San Gerardo, una parroquia que cuenta con 505.000 habitantes y que está dentro de la zona de influencia del proyecto minero Loma Larga y en el cual se invirtieron $ 3,1 en obras relacionadas con la dotación de alcantarillado, construcción y ampliación del sistema local de agua potable y la implementación de programas de acceso a las tecnologías de información y comunicación; y en la construcción de un centro de salud.
Esta última obra fue inaugurada en abril por el vicepresidente Glas e implicó una inversión de $ 695.000. Por otra parte, en la parroquia Molleturo, el Gobierno Nacional planificó la construcción de 19 proyectos de infraestructura.
De aquellos, hasta el momento, 18 proyectos concluyeron y corresponden a los sectores de educación, electrificación, telecomunicaciones, saneamiento ambiente y salud.
En Molleturo, por otra parte, el actual centro de salud tiene un área de 4.639 metros cuadrados y beneficia a 12.000 habitantes. En la edificación se invirtieron $ 1,9 millones.
Hasta la fecha se realizan otros estudios de vialidad y existe uno contratado correspondiente a comunidades del Milenio. También, se efectuaron acciones para fortalecer la producción agroecológica de la zona. (I)