Hoy, el ministro de Minería, Javier Córdova, recibirá la petición del cambio de fase de exploración a explotación del proyecto minero Fruta del Norte (FDN) solicitada por el presidente ejecutivo de Lundin Gold, Ron Hochstein.    

Esta solicitud viabilizará el primer proyecto minero subterráneo a gran escala que iniciará sus operaciones en Ecuador y que está inserto en las acciones que el Gobierno Nacional viene desplegando en función del cambio de la matriz productiva y de la atracción de la inversión extranjera.

Una vez que la petición de cambio de fase sea aprobada por el Estado ecuatoriano, se procederá a la firma del contrato de explotación minera. Esto dará inicio a la fase de construcción y desarrollo del yacimiento y, posteriormente, a la extracción, beneficio, transporte y comercialización de minerales en los mercados internacionales.

El aprovechamiento de la minería a gran escala requirió tiempo

En diciembre de 2014, Lundin Gold adquirió Fruta del Norte, un proyecto de minería que había sido operado previamente por la empresa Kinross.

En junio de 2015, el Estado ecuatoriano y Lundin Gold iniciaron el proceso de negociación del contrato de explotación de Fruta del Norte, teniendo como expectativa por aquel entonces que la producción a gran escala pudiese empezar recién a principios de 2018.

Seis meses después, el 14 de enero de 2016, se suscribió un acuerdo sobre los términos y condiciones de ese contrato. En este se estableció que Lundin Gold le pagará al Estado ecuatoriano $ 65 millones por concepto de regalías anticipadas. El primer desembolso de aquel anticipo será por $ 25 millones y se efectuará al momento de la suscripción del contrato.

En ese mismo mes, los voceros de la empresa canadiense anunciaron que solicitarían el cambio de la fase de exploración a explotación antes del 17 de junio. También Lundin ratificó que había firmado 27 convenios en 2015 con los cantones de Yantzaza, El Pangui y Paquisha.

Según se reportó en ese momento, aquellos convenios implicarían $ 1 millón en inversiones comunitarias relacionadas con obras tales como mantenimiento de la red vial rural y del Parque Juan Pablo II en la parroquia de Los Encuentros; el fomento a la producción local con la creación de parcelas agropecuarias en las comunidades de

La Delicia, Nankais y Nunguí; el apoyo a los agricultores de la Asociación de Pequeños Exportadores Agropecuarios Orgánicos del Sur de la Amazonía Ecuatoriana (Apeosae); la promoción del deporte, la música y la danza a través del proyecto ‘Escuela de Formación Permanente Cultural y Deportiva’ (Fopcude); el apoyo al sistema de abastecimiento de agua para el barrio Río Blanco y la participación en campañas de prevención en salud en conjunción con Solca-Zamora.

El proyecto aprovechará uno de los yacimientos más grandes

El pasado 6 de junio, la empresa canadiense Lundin Gold anunció los resultados de un estudio de factibilidad del proyecto Fruta del Norte, localizado en la concesión minera denominada ‘La Zarza’ y cuya titularidad corresponde en un 100% a Aurelian Ecuador S.A.     

Dicho estudio, que fue preparado por Amec Foster Wheeler, confirma que Fruta del Norte permite el desarrollo de una mina subterránea de oro de alta ley que es viable y robusta económicamente.

“El estudio de factibilidad establece una base sólida que permitirá avanzar inmediatamente en el desarrollo de Fruta del Norte, llevándolo a convertirse en un referente de operación de alta calidad y rentabilidad para la compañía, sus accionistas y para Ecuador. Con el apoyo del Gobierno de Ecuador esperamos construir una mina de oro histórica de alta ley”, indicó el presidente de Lundin Gold.

Según el estudio de factibilidad, Fruta del Norte es uno de los yacimientos auríferos no desarrollados más grandes del mundo. En este proyecto minero se puede encontrar oro fino libre, oro grueso libre, oro contenido en sulfuros y oro contenido en silicatos. Hasta el momento, sus reservas están estimadas en 4,82 millones de onzas de oro y en 6,34 millones de onzas de plata.

El análisis económico prevé una inversión por $ 961 millones

Según datos proporcionados por Lundin Gold, se prevé invertir $ 961 millones para la fase de construcción, producción y cierre de la mina ubicada en la parroquia Los Encuentros

Para estimar la factibilidad, el análisis económico del proyecto efectuó cálculos tomando como referencia un precio de $ 1.250 por onza de oro y un precio de $ 20 por onza de plata. Con estos parámetros -y asumiendo que las actividades iniciarán efectivamente en julio de 2017- se estimó que, en valores actuales netos, el proyecto generará un rendimiento para sus inversionistas de $ 1.283 millones antes de impuestos y de $ 676 millones después de impuestos.

Esta proyección equivale a la obtención de una tasa interna de retorno para la inversión privada del 23,8% antes de impuestos y del 15,7% después de impuestos.

En razón de lo anterior, a partir del momento en que inicie la producción, los inversionistas podrían recuperar la inversión en 3,7 años si se considera el valor antes de impuestos o en 4,5 años si se considera el valor después de impuestos.

Por otra parte, durante la vida útil del proyecto, los ingresos totales llegarán a $ 5.301 millones, los costos operativos a $ 1.961 millones, la utilidad operacional a $ 3.339; los impuestos y regalías a $ 914 millones y los gastos de capital a $ 975. Con esos rubros, en la contabilidad de la empresa minera, el flujo total de caja llegaría a $ 1.449 durante ese lapso.     

El Estado ecuatoriano recibirá beneficios por $ 928 millones

Hasta el momento se estima que la vida útil de Fruta del Norte será de 13 años. En este período, el proyecto minero generará $ 928 millones en beneficios para el Estado en impuestos, regalías y participaciones. Ese rendimiento equivale a un promedio de $ 72 millones en ingresos para el sector público.

Según estimaciones del ministerio del ramo, Ecuador tendría un potencial minero de $ 200.000 millones. A efectos de aprovechar estos recursos, en el ‘Catálogo de Inversiones de los Sectores estratégicos 2015-2017’, el Gobierno Nacional ya planteó la posibilidad de desarrollar alianzas público-privadas para proyectos mineros ubicados en provincias como Imbabura, Esmeraldas, Zamora Chinchipe, Bolívar, Pichincha y Sucumbíos.

De todos los proyectos posibles en el país se consideran como estratégicos a Mirador, Loma Larga, Río Blanco, San Carlos Panantza y Fruta del Norte. Si estas iniciativas logran efectivizarse según lo esperado, se podrían generar recursos fiscales superiores a $50.000 millones y exportaciones anuales por $ 4.000 millones. (I)

DATOS

El proyecto minero generaría 2.000 empleos en la fase de construcción, 1.000 empleos en la fase de operación, y 7.000 empleos indirectos.  

En julio de 2017 se prevé el inicio efectivo de la producción en el proyecto minero. A partir de ese momento, las inversiones realizadas podrían recuperarse en un lapso menor a 5 años.

La factibilidad de Fruta del Norte fue calculada a través de un estudio en el cual se consideraron las reservas probables hasta el 30 de abril de 2016. No se estimaron las reservas probadas.  

Hasta el 94% de recuperación metalúrgica se espera alcanzar en los recursos minerales que tienen viabilidad económica demostrada dentro de las zonas subterráneas explotables concesionadas a la empresa Lundin.

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Piden moratoria a concesiones

'Se debería suspender todo proyecto minero'

En una entrevista a Diario EL TELÉGRAFO, Carlos Pérez Guartambel, presidente de la Ecuarunari, manifestó que se deberían suspender definitivamente los proyectos mineros que están en marcha en el país, por su impacto ambiental. Además señaló que estos proyectos no son financieramente adecuados, ya que la balanza es negativa cuando se efectúa una relación entre los costos de mitigación o reparación ambiental con las regalías. “Las reparaciones no tienen precio”, puntualizó.

A su criterio, no hay ninguna garantía de protección al medio ambiente por lo cual su organización se opondrá a todas las iniciativas que afecten las fuentes de agua, zonas de biodiversidad y zonas aptas para la agricultura y ganadería. Su propuesta, dijo, es dejar de lado el extractivismo para promover una revolución del sector agropecuario y así hacer frente a la crisis alimentaria.

Por otro lado señaló que las comunidades deben ser consultadas sobre los proyectos mineros que se planifiquen. “Solo con el consentimiento de las comunidades habría una auténtica democracia. De no ser así el gobierno tiene la oportunidad de hacer una consulta popular”.

Pérez Guartambel manifestó también que no ha existido moratoria minera en el país y que la resistencia de las comunidades es la única razón por la cual no se ha procedido en esta materia. Sobre el inicio de la fase de extracción en Fruta del Norte, el dirigente señaló que se encuentra en una zona sensible de mucha biodiversidad y por tanto será el espejo de lo que sucederá con el resto de proyectos. (I)